Guillermo Corral: "Conseguir el título del 2016 es parecido a lograr una olimpiada"

--Faltan cuatro meses para que se cierre el plazo de presentación de proyectos ¿Sabe qué hace cada candidatura?

--No se ha recibido ninguna aún, algo que es normal porque cada una está desarrollando su programa y la planificación con vistas al límite del plazo. Imagino que todas entrarán en las dos últimas semanas. Incluso a nivel oficial ni siquiera tenemos constancia de quién se presenta y quién no.

--En el caso de Cáceres. ¿Tiene noticias del proyecto?

--Conozco algo de forma informal. Sabemos qué está haciendo cada uno por los medios de comunicación, pero sin más.

--¿Se atreve a valorarlo?

--No lo haría en ningún caso.

--¿Conoce Cáceres?

--Sí. He ido con frecuencia. Es una ciudad espectacular.

--Un jurado de 13 expertos valorará los proyectos. ¿Quiénes serán? ¿Qué criterios se siguen para elegirlos?

--Hay seis del Ministerio de Cultura y siete de las instituciones europeas. Serán personas que hayan desarrollado un trabajo de primer nivel en la elección de una capital cultural, con conocimiento de grandes acontecimientos internacionales, planificación urbanística y su repercusión socioeconómica. También se ha valorado el equilibrio territorial, de sexos y edades. El principal criterio será el de la neutralidad y que prime el análisis de los méritos.

--¿Cuándo se constituirá?

--Será a finales de abril o principios de mayo. No es urgente. Las ciudades conocerán con tiempo suficiente quiénes son.

--¿En qué orden se las citará?

--El jurado marca las reglas. El papel del ministerio es de apoyo logístico. Una vez que quede constituido el jurado, nos desvincularemos. Hemos creado el marco jurídico para que el proceso tenga lugar con garantías.

--¿Las ciudades que pasen el primer corte se conocerán antes de que termine este año?

--Sí, sí. Lo razonable es que en octubre o noviembre pudiera estar completado el primer corte.

--En las bases de la convocatoria se expone que se elegirá una lista restringida de candidatas en la primera criba. ¿De cuántas?

--Corresponde al jurado. El número de seleccionadas dependerá de la cantidad y la calidad de los proyectos. Si hay muchos candidatos y muy buenos, tendrá que afinar y es posible que quiera hacer una segunda vuelta.

--¿Se parecen en algo una capitalidad y una olimpiada?

--Claro que se parecen. Son acontecimientos de distinta naturaleza, uno deportivo y otro cultural, uno de dimensión global y otro europea. La capitalidad es una buena oportunidad que muchas ciudades han sabido aprovechar estupendamente para reinventarse o marcar su planificación urbanística para los próximos 20 o 30 años.

--Pero no hay grandes inyecciones de dinero público.

--Eso corresponderá decidirlo a quién esté en el Gobierno. Quedan nada menos que seis años. El volumen económico no es el mismo que se maneja en unas olimpiadas, pero sí tiene un impacto muy importante en cifras de turismo, de movimiento y de posicionamiento de la ciudad en el ámbito europeo. Hay que pensar también la repercusión en internet. El carácter de un acontecimiento de este tipo se puede transmitir a mucha distancia.

--Pero el dinero que llega de la Unión Europea no es mucho...

--La financiación de la Comisión es pequeña, pero tiene como fin desincentivar las candidaturas oportunistas e impulsar las serias y fundadas que descansan en un proyecto consolidado y viable, que también es muy sano, más en un momento como el actual. No se trata de hacer fuegos artificiales sino de pensar bien el porqué de las cosas y construir un discurso coherente, lógico y sostenible. Es una gran oportunidad.

--Cáceres 2016 defiende que Extremadura no ha albergado un evento internacional. ¿Puede pesar en la decisión?

--El jurado decidirá atendiendo a criterios técnicos. Supongo que todas las ciudades construirán un discurso estupendo y lo defenderán bien.

--¿Qué recomendaciones da?

--Que piensen en la razón de ser de este acontecimiento que es, fundamentalmente, reivindicar la idea de una cultura europea común, vital y que está cambiando en muchos sentidos. Quien combine lo europeo y lo local y traiga Europa a su ciudad, sin dejar de ser ella misma, tendrá muchas garantías de éxito.