El pacto de gobierno no saltó por los aires en el pleno de ayer, aunque casi. El concejal de Izquierda Unida, Santiago Pavón, se abstuvo en la votación del primer punto del orden del día, la aprobación del expediente del plan de saneamiento, forzando a Heras a recurrir a su voto de calidad para aprobarlo por mayoría simple --11 votos del PSOE y uno de Foro Ciudadano--. Después puso a la alcaldesa ante las cuerdas con su amenaza de abstenerse de nuevo en el segundo punto, impidiendo la mayoría absoluta necesaria --el PSOE necesitaba su voto, además del de que ya había garantizado Felipe Vela para sumar los 13 requeridos-- para contratar el crédito de 30 millones con el que el ayuntamiento pretende afrontar la deuda actual.

"Si tenemos mayoría absoluta este ayuntamiento concierta la operación de crédito y paga. Si no, no concierta la operación de crédito, no paga, y que cada uno responda ante los acreedores sobre el sentido de su voto", increpó Heras a Pavón antes de proceder a la votación.

El edil de IU exigía para darle su voto que la alcaldesa se comprometiera a estudiar la posibilidad de que la concesión del agua se gestione a través de una empresa mixta, algo que se había debatido durante dos horas en el punto anterior, como le hizo saber Heras. Finalmente Pavón permitió con su voto la mayoría absoluta necesaria para aprobar la operación de crédito.

PLENO DEL AGUA Antes, y aunque no figuraba en el orden del día, el modelo de gestión del servicio municipal de agua centró parte del tenso debate de ayer. El motivo es que de la gestión del agua depende el canon que la empresa que lo asuma deberá abonar al ayuntamiento y que es el principal recurso para la operación de saneamiento; y el canon va a depender del modelo que se apruebe: gestión mixta, como quiere IU o indirecta como prefiere el PP, Vela y como también dejó ayer ver que prefería el PSOE aunque no se pronunció abiertamente.

Finalmente esta cuestión no se resolvió. Vela insistió en el modelo de gestión indirecta, e incluso tendió la mano al PP para que presentara una propuesta en ese sentido que él apoyaría, pero se mostró partidario de apoyar la gestión mixta "si es la opción menos mala" para sacar adelante el plan de saneamiento y si se evita así que el servicio finalmente se municipalice, "no obtengamos nada y no podamos pagar", dijo.

También el portavoz del gobierno, Lorenzo de la Calle apeló a "la responsabilidad política de todos" para sacar adelante "una inyección económica sin precedentes que permitirá pagar a proveedores, contratistas, suministradores o juntas de compensación" y que "quitará al ayuntamiento el sanbenito de mal pagador", afirmó. Por su parte la portavoz del PP, Elena Nevado, criticó que el gobierno no haya contado con su formación para diseñar ese plan de saneamiento y afirmó que las operaciones de crédito "solo cambian una deuda por otra", dijo.

El plan de saneamiento se aprobó finalmente, aunque hubo que ir a la segunda votación tras un empate a 12 votos --Pavón se abstuvo y al verlo Vela, que no iba a votar a favor, levantó el brazo junto al resto de concejales del PSOE "para poder aprobar de una vez el plan de saneamiento", justificó después-- y en ella recurrir al voto de calidad de la presidenta del pleno, Heras, tras la abstención de su teniente de alcalde.

UN POCO HARTA Pavón amenazó de nuevo con abstenerse en la siguiente votación, para aprobar el expediente de concertación de las 6 operaciones de crédito por 30 millones. Ahí su voto era imprescindible porque era necesaria una mayoría absoluta (su voto, además de los 11 del PSOE y el que comprometió Vela) que finalmente ha permitido "para evitar la quiebra", dijo después.

"Hemos estado a punto de no poder pedir el préstamo porque IU se hace de rogar, siendo el primer teniente de alcalde. Esto es muy fuerte y empiezo a estar un poco harta", afirmó al término del pleno la alcaldesa sobre su socio de gobierno, al que acusó de "hacer todo lo posible para que el equipo de gobierno tenga dificultades". Aunque se mostró cauta hasta hablar con su partido, reconoció que "habrá que tomar alguna decisión, porque durante dos años y a pesar de que forma parte del equipo de gobierno no me lo ha puesto nada fácil".

La alcaldesa recriminó también a Pavón por emplear "unas formas de dirigirse a la alcaldesa totalmente fuera de lugar" y le advirtió que hasta ahora ha ofrecido "mucha tranquilidad", porque cree que "al final a cada uno se le pone en su sitio", dijo". Heras no tiene previsto reunirse hoy con su partido aunque dijo: "soy consciente de que tengo que hacer un movimiento, y lo haré".