Un expastelero, una exconcejala de Izquierda Unida, un jovencísimo profesor de inglés y un estudiante de 17 años no tendrían aparentemente nada en común si no compartieran una pasión: la escritura, que para Jacinto García, conocido por su histórica y ya desaparecida confitería La Salmantina, es "la expresión de la vida interior".

El libreto Frescos reúne ahora los textos de estos escritores principiantes fruto de su participación el año pasado en el taller de escritura creativa El País literario , que dirige la escritora cacereña Pilar Galán. El libro recopila narrativa y poesía de siete alumnos de este taller anual y textos de otros escritores ya consolidados que colaboraron durante el año pasado en el curso, como Basilio Sánchez, Hilario Jiménez, Francisco Rodríguez, Clara Obligado o José María Cumbreño.

Transmutación del corazón es la historia del más joven, Samuel Encinas, estudiante de bachillerato en la Laboral, que bebe de la fantasía de Paulo Coelho. Encinas, como el resto, escribe "desde siempre" pero esta es la primera vez que uno de sus escritos traspasa la intimidad de sus cuadernos. "Me ha hecho mucha ilusión ver el librito y publicar con mis compañeros y los escritores, pero me lo tomo con mucha humildad", declara.

A Jacinto González la jubilación le ha dado la oportunidad de retomar sus viejas pasiones: la escritura y el teatro. Entre las dos reparte ahora el tiempo que le robaba la confitería. "He escrito desde siempre, pero soy un aprendiz", confiesa. En Frescos se ha incluido una greguería que ha sido "un gozo" ver publicada por primera vez a sus 72 años. Pero nunca es tarde, ni siquiera para releer a los clásicos, como hace ahora cuando le deja su participación en la Compañía Lírica Extremeña.

Otro principiante en publicar, que no en escribir, es Fernando Alcalá. Su cuento El sillón , la historia de un niño que juega con la silla eléctrica del padre en una reflexión sobre la pena de muerte, está también entre las páginas de Frescos .

El taller les ha servido a los tres para perfeccionar su escritura: cómo construir un personaje, cómo desarrollar un argumento, dar con el tono narrativo... Lo que no han podido aprender son "las ganas y las cualidades de escribir" que están en cada uno porque, como reconoce Pilar Galán, "eso no se enseña".