Otro turismo es posible y alojarse en una acogedora casa rural en la ciudad en vez de en una fría habitación de hotel, también. Las Casas Pintadas son un ejemplo. Una nueva empresa hotelera ha abierto en Cáceres dos alojamientos turísticos similares a las casas rurales pero urbanas, las primeras que existen en la ciudad. Una se encuentra en la plaza de las Canterías, que funciona desde enero, y otra en la calle San Justo, abierta esta semana.

"Es turismo urbano con las características del turismo rural", apunta Marta Torres, la dueña y promotora, quien destaca también el beneficio que supone este tipo de alojamientos para la rehabilitación de las viviendas del casco histórico.

En ambos casos, se trata de casas restauradas y acondicionadas como apartamentos turísticos que ofrecen al visitante "la comodidad de su casa", con el "confort y servicios de un hotel" en el corazón de la ciudad. Así, las viviendas disponen de yacuzzi, aire acondicionado y calefacción, internet, cocina equipada, chimenea y servicio de limpieza y lavandería. Además, permiten mascotas y para ellas, cuentan con camas y comederos.

Servicio a la carta

Pero eso no es todo, el servicio al turista es a la carta. Se le gestiona desde entradas a espectáculos o restaurantes, visitas guiadas, excursiones, recogida en las estaciones, el desayuno y un sinfín de comodidades más que solicite el viajero. Aunque todo eso no es lo que más sorprende a los que optan por estas casas, sino que "estén en el corazón de la ciudad", comenta Carina Neri, su directora. "La gente piensa que como es parecido a una casa rural, está a las afueras, no saben que también las hay urbanas".

El nombre responde a la singularidad decorativa de los apartamentos. La pintora Rebeca Giral, de Coria, ha plasmado en las paredes pequeñas historias que sirven de elementos decorativos irreales o complementan los reales. Un perchero, unas maletas, un perro tumbado junto a la chimenea, libros que vuelan, los cabeceros de la cama, una estantería... "Queríamos jugar con los objetos, con lo real y lo irreal y así la casa es un cuento que se va narrando", explica Giral.

En la plaza de las Canterías está la Casa Pintada, El libro, con capacidad para 8 personas. La de San Justo es la Casa Pintada, El cuadro, con 6 plazas. Su precio es sin duda otro de los atractivos, 100 euros más IVA por día, lo que para un grupo de 8 personas resulta una ganga comparado con las tarifas de los hoteles.

Catalanes, madrileños, andaluces, holandeses o americanos ya han pasado por la de Canterías con una media de estancia de dos días, y las dos casas están ya reservadas hasta agosto, lo que demuestra la demanda.