Como agua de mayo esperan los hosteleros la nueva ordenanza que regulará todo lo que a ocio se refiere en la ciudad y, principalmente, los locales. Son muchas las peticiones que han hecho al respecto el colectivo más afectado por esta normativa municipal.

Entre ellas, destaca la regularización de los horarios de cierre y de la actividad de los café-concierto, así como una flexibilización de ciertos aspectos que atañen a los locales, como las dimensiones que deben tener para acoger actuaciones en directo o el cambio de las licencias para poderlas programar sin riesgo a ser denunciados.