La imposición a la Virgen María Corredentora de una nueva corona en oro y con cristales de Swarovski cerró ayer los actos de conmemoración del 525 aniversario de la fundación de la Cofradía del Humilladero. Fue un acto sencillo, con una misa en la iglesia del Espíritu Santo oficiada por el obispo Francisco Cerro y que contó con la actuación del coro de la hermandad, que es una de las más antiguas de la ciudad.

«Ha sido el año más importante para nosotros y hacemos un balance muy positivo de todos los actos que hemos llevado a cabo», señaló el mayordomo de la cofradía del Humilladero José Diego Rodríguez Moreno. En la misa se llevó a cabo la bendición de la nueva corona que «ha regalado la ciudad», según detalló Rodríguez Moreno, a través de los donativos que se han recogido este año. La virgen, que habían instalado en un pequeño trono en el suelo, lucía una corona de flores que fue sustituida después por la nueva joya, obra del taller de orfebrería Paula, de Lucena (Córdoba), con cristales de Swarovski engarzados, el escudo de la cofradía impreso y rematada por estrellas.

Al acto asistió la alcaldesa Elena Nevado y el líder de la oposición Luis Salaya, así como la presidenta de la Audiencia María Félix Tena, el subdelegado de Defensa, Enrique Martín Bernardi y el presidente de la Unión de Cofradías Santos Benítez.