El juzgado de lo penal condena a un joven responsable de un delito de robo con intimidación, en grado de tentativa a una pena de un año de prisión. El acusado se introdujo en un garaje y se apropió de una furgoneta y de dos tijeras de podar. A continuación, y sirviéndose de las tijeras logró abrir la puerta del trastero extrayendo de su interior una bicicleta y un gramófono. También intentó abrir, aunque sin lograrlo, otros dos trasteros del inmueble. En pleno acto, fue sorprendido y retenido por el portero del inmueble, hasta que funcionarios policiales se personaron en el lugar de los hechos.