Residentes de la calle Amargura, en la ciudad monumental, expresaron ayer su indignación por las multas que impuso ayer la policía local a al menos cinco coches estacionados en la esta calleja junto a Santa María, dos de ellos pertenecían a residentes de la misma calle.
Antonio Luceño, hermano de uno de los sancionados, criticó la medida indiscriminada que se tomó ayer por la mañana en esta calle y con los vecinos que viven en ella cuando "todas las plazoletas de la ciudad monumental están diariamente repletas de vehículos estacionados, a todas horas, y de gente que no son residentes y que ni siquiera tienen tarjeta de acceso a la zona intramuros", manifestó.
Las sanciones que se impusieron ayer ascendían a 70 euros. El motivo esgrimido por la policía local, según este residente, es que en la ciudad monumental no se puede aparcar. "Sin embargo --defiende el afectado-- no actúan en otras calles de la zona. Llevo 33 años viviendo aquí y nunca hemos tenido problemas ni se nos ha multado",.
La restricción al tráfico de la ciudad monumental es bastante aleatoria a pesar de la existencia de los pivotes que teóricamente solo permiten el acceso a la zona con tarjetas autorizadas. Los residentes han denunciado en diversas ocasiones esta situación.
