No hay excusa para no leer en verano. Ese es el propósito con el que la sección de Bibliotecas de la concejalía de Cultura ha puesto en marcha este verano una iniciativa para llevar los libros a uno de las zonas con mayor afluencia de público en estas fechas: las piscinas. La iniciativa, que ya ha pasado por la piscina del Parque del Príncipe, y la de Aldea Moret --donde permaneció desde el pasado lunes hasta ayer--, recorrerá en las próximas semanas otras piscinas de la ciudad, según señaló el teniente de alcalde y concejal de Cultura, Santiago Pavón, que elogió el trabajo que han desarrollado en Bibliotecas para poner en marcha el proyecto.

En la iniciativa se están utilizando un total de 300 libros de distintos géneros y con títulos para todas las edades, que se van alternando en el expositor según las preferencias que muestren los usuarios de las instalaciones. Entre los volúmenes hay obras clásicas como Frankenstein , de Mary Shelley o El último mohicano , de James Fenimore, aunque los más demandados son los títulos infantiles --fundamentalmente los libros de Disney-- así como los libros de cocina, bricolaje o de viajes.

El expositor, un carrito, permanecerá instalado desde hoy y hasta el domingo en la piscina de Pinilla, donde se podrá hacer uso de los libros desde las doce de la mañana a las siete de la tarde; al igual que en la siguiente parada del expositor, la piscina de Proexa, donde permanecerá entre el lunes 25 de agosto y el domingo día 31. Además está previsto que la iniciativa se prolongue hasta que concluya la temporada de piscinas, el 15 de septiembre, y que en ese tiempo el expositor recorra otras instalaciones de baño.

Pavón destacó que si la actividad cuenta con el respaldo de la población, en los próximos meses "y mientras la climatología lo permita", añadió, el mismo estand se ubicará en otros puntos de la ciudad, principalmente en parques. "El objetivo es que los libros lleguen al ciudadano, ahora al bañista y tras el verano a cualquier otro usuario", señaló el edil.