El delegado sindical de CGT, Bernabé García González, asegura que la empresa Catelsa, dedicada al caucho industrial, la automoción y las mezclas de caucho, plantea alargar su ERTE hasta diciembre y no descarta 50 despidos a partir del mes enero.

García indica que el expediente laboral afecta a toda la plantilla, de 250 trabajadores, y que culminó el día 30. «Pero ahora la empresa quiere prorrogarlo y nos convocó el martes a una reunión a las centrales sindicales, en la que participamos junto a CCOO y UGT».

En ese encuentro, añade García, «nos dijeron que la producción estaba mejorando porque el sector del automóvil está dando sus pasos. Sin embargo, la facturación va a bajar un 20% y se va a poner a los niveles de 2014, según las previsiones de la empresa, y eso implicaba despidos. Lógicamente nos quedamos de piedra porque no entendemos esta decisión teniendo en cuenta las ayudas estatales y las exoneraciones de la Seguridad Social».

CGT muestra su «oposición total porque en 2014 la facturación se situó en 27 millones de euros y no se redujo personal». García critica también la «externalización de servicios que se está realizando y que afecta del orden de 18 o 20 trabajadores. Con eso se quiere transferir la producción a precios de bajo coste en países como Tánger o Polonia». Mañana viernes hay otra reunión de los sindicatos y el lunes se vuelven a ver con la empresa.

Catelsa es la mayor planta industrial de Cáceres, situada en el polígono de Las Capellanías desde 1973 y dedicada a la fabricación de piezas de caucho y termoplástico para la industria del automóvil (Peugeot, Nissan, Renault, Toyota...)

Cuentan las crónicas cacereñas que su grupo, Hutchinson, puso los neumáticos a la primera bicicleta que ganó el Tour en 1926, participó en la evolución del automóvil, aportó importantes sistemas a los trenes de alta velocidad, a los submarinos, a los aviones, incluso a los cohetes espaciales.