Desde el vacío de la pobreza y el aislamiento, la denuncia que realizó en Cáceres el padre Balashoreddy Jeddy en 2007 llegó hasta la solidaridad de los cacereños. Fue la denuncia de la situación de injusticia y exclusión social que sufrían los niños de Desapura, un poblado situado al este de Hassan (India). Como respuesta, se constituyó la ONG Madre Teresa de Cáceres gracias a Ramón Piñero, su presidente, que aún continúa trabajando en la zona y buscando apoyos.
La ONG busca solucionar la situación que sufren los niños del poblado de Desapura en el estado de Karnataka, que se vieron obligados a trasladar sus viviendas a otras zonas por las inundaciones surgidas tras la construcción de una presa en el río Hemavati. El poblado actualmente solo cuenta con una escuela de Primaria que educa a los niños hasta el séptimo curso, y para continuar sus estudios deben trasladarse a Channarayapatna, a 27 kilómetros de Desapura, cuyo autobús más cercano está a unos cuatro kilómetros de la ciudad.
La ONG Madre Teresa de Cáceres colabora para dar solución de este problema. Según explica el responsable de prensa, Juan Antonio Pulido Alcón, lo hacen a través de una ayuda a los niños sin recursos y marginados en especial y a las familias pobres en general, y de la construcción del Instituto de Educación Secundaria Nirmala. Esta idea surge de la diócesis de Chikmalagur, pero con proyecto y asignación económica desde Cáceres, cuyo proyecto de arquitectura ha sido llevado a cabo por un estudio de arquitectos de la ciudad de manera altruista, y financiado por sus miembros, en palabras de Juan Antonio Pulido, "mayoritariamente cacereños de buena fe".
La construcción del instituto se realizará con materiales fabricados en la zona, y los productos necesarios serán adquiridos a los habitantes del poblado, con el fin de paliar la situación de pobreza que se vive en la región por culpa de la sequía en la zona provocada por la presa. Este proyecto tiene un presupuesto de 216.037 euros y se sustenta en las donaciones de los miembros de la asociación, además de un apoyo por parte de Manos Unidas.
El proyecto, con el que se puede colaborar poniéndose en contacto en la sede de la ONG en la Calle Islas Filipinas, nº16, a través de su página web www.ongmadreteresa.org o de su cuenta en Liberbank, se espera que esté terminado en tres años y permitirá así no solo dar una solución a los jóvenes de Dasapura, sino también a los poblados cercanos, "que sin importar la religión a la que pertenezcan, serán bienvenidos", subrayan desde el colectivo. Este proyecto, iniciado en Cáceres y sustentado básicamente por socios y donaciones, tiene la mano desde Cáceres hacia la India.
