El comercio ha mostrado su satisfacción por el control policial que se está realizando en la capital cacereña, y que ha permitido que locales vinculados a la comunidad china comiencen a respetar la normativa regional de horarios que rige sobre todos los establecimientos. Hace unos meses, los comerciantes pidieron la intervención de la Junta y el ayuntamiento para poner freno a la apertura de algunos de estos negocios en domingos y festivos, incumpliendo la Ley de Comercio de Extremadura.

La norma establece que las grandes superficies, las franquicias y las tiendas que superan los 300 metros cuadrados solo pueden abrir ocho domingos o festivos al año, establecidos por las instituciones. Las de menor tamaño, en cambio, tienen plena libertad horaria. Según Aeca, la intervención policial, informando debidamente a los comerciantes chinos, ha surtido efecto. "Hay que decir que Cáceres es una excepción, porque en otras ciudades siguen abriendo", informa la asociación.