El Partido Socialista e Izquierda Unida celebraron ayer sendos actos en recuerdo de la II República, en el 82 aniversario de su proclamación. Ambas formaciones reivindicaron la apertura de un debate sobre la implantación de una nueva república en el país.

Miguel Angel Morales, secretario provincial del PSOE, afirmó que "no se puede ser jefe de estado por razones de sangre", y aclaró que ésta es una demanda "democrática" e "independiente" de los problemas que atraviesa la Corona. Por ello, afirmó que "ha llegado el momento de plantearse el debate de la república como sistema en España", y enumeró los avances sociales alcanzados entre 1931 y 1936.

Por su parte, la Plataforma Republicana ha organizado actos en favor de este modelo de gobierno durante el fin de semana, y ayer se concentró ante la tumba de las víctimas del franquismo. Víctor Casco recordó que en Cáceres fueron fusiladas 520 personas, otras 25 desaparecieron y 150 murieron en la cárcel "defendiendo los derechos del pueblo". Intervinieron familiares de los fallecidos, estudiosos y miembros de izquierdas como Luis Gibello, Manuel Cruz, Pepe Hinojosa y Milagrosa Carrero.