Francisco Javier Hernández Hernández, cirujano colegiado en Cáceres desde el año 1974 y con larga experiencia en el hospital San Pedro de Alcántara, ha sido nombrado subdirector del Hospital Virgen de la Montaña, cargo que entrará hoy en vigor según confirmó ayer el SES. Caracterizado por una buena relación con sus compañeros de profesión e implicado en tareas de investigación y formación, será el responsable de gestionar la asistencia sanitaria en el hospital, en contacto directo con la plantilla.
Javier Hernández sustituye a Francisco Calvo, hasta ahora director del recinto, pero lo hará como subdirector. Este rango menor también se aplicará en los próximos nombramientos de los responsables del Hospital San Pedro de Alcántara y de Atención Primaria, que serán subdirectores, no directores. La medida permitirá ahorrar unos 300 euros por cada nómina, según los cálculos del Colegio de Médicos. En el caso del San Pedro, el SES ha manifestado su intención de que el gerente del Area de Salud de Cáceres, Francisco Javier Godoy, consensúe la elección del responsable con los propios médicos, tras la polémica surgida por el nombramiento de José Luis Pérez-Toril como director asistencial de Cáceres-Coria.
LISTAS PREOCUPANTES
Los subdirectores de los dos hospitales tendrán un papel muy importante, ya que deberán llevar a la práctica las soluciones para reducir las listas de espera, muy preocupantes según los sanitarios. A 30 de septiembre, 20.630 extremeños aguardaban una operación, otros 28.534 habían superado el plazo de 60 días para ser vistos por especialistas, y 27.836 rebasaban el mes para una prueba diagnóstica. El SES baraja aumentar la actividad en los quirófanos y ampliar a la tarde la atención en algunas especialidades. Los dos subdirectores deberán concretar con el personal hospitalario cómo se arbitran estas soluciones.
En principio, los médicos no se muestran contrarios a trabajar por las tardes, pero el modo y las contraprestaciones deben concretarse. "Están dispuestos a trabajar porque las listas se han disparado de forma alarmante, es cuestión de buena voluntad, de llegar a un acuerdo", explica Carlos Arjona, presidente del Colegio de Médicos de Cáceres. El dinero no parece inicialmente un escollo, porque los profesionales son conscientes de la situación que atraviesan las arcas públicas en estos momentos. "Además pueden estudiarse alternativas como la concesión de tiempo libre para asistir a congresos o retribuciones por cumplir objetivos en la reducción de las listas", señala Carlos Arjona. "Lo que realmente deseamos los médicos es un reconocimiento a nuestra labor, dura y difícil, que no siempre existe", subraya.
