Badajoz, 12-5-1990. Estudia Filología Portuguesa en Cáceres y no pierde de vista 'su' Valencia de Alcántara.

--¿Qué tal le va en Cáceres en su vida universitaria?

--Estoy muy a gusto en esta ciudad en lo que se refiere a mis estudios. Tengo muchos amigos que han terminado sus respectivas carreras aquí en Cáceres y están en sus pueblos aburridos diciéndome: "Ni te imaginas cuánto echamos de menos la vida universitaria".

--¿No hubiese preferido otros sitios con más gancho como Salamanca o Granada?

--Estoy muy apegado a mi pueblo, Valencia de Alcántara. Puede que sea una virtud o un defecto, pero no consigo imaginarme mucho tiempo sin visitarlo. Estudiar en esos destinos implicaría estarlo. Solo de pensarlo me agobia.

--¿Cómo ve a la gente de su edad?

--No creo que haya habido recientemente una generación tan perjudicada como la mía, tanto si eres un estudiante o un trabajador más. Nos ha tocado la década de la incertidumbre. La gente brillante siempre sale adelante, pero me parece que los de mi generación tienen un "extra" de mérito.

--Suelen quejarse de la falta de alternativas de ocio en la ciudad. ¿De acuerdo?

--Quejarse en Extremadura suele ser lo fácil, yo no pienso así. Es más un problema de apatía que, en general, llevamos los extremeños dentro. Cáceres podría tener alternativas de ocio mejores (como casi todas las ciudades) pero... ¿tendrían éxito?

--Tiene usted fuertes raíces lusas. ¿Cree cierto eso de que los españoles miramos por encima del hombro a los portugueses?

--Los que lo hacen lo hacen simplemente por puro desconocimiento. Y son una minoría. Es un absurdo y un error tremendo crear "barreras" entre ambos países. Han de ser una simbiosis y cuantos más lazos de unión creemos, mejor nos irá a todos. Mi padre es portugués, mi madre española y vivo en una zona fronteriza, sé de lo que hablo. Mi abuelo era contrabandista, hacía muchos kilómetros todos los días para alimentar a su familia al igual que los que estaban al otro lado de la frontera. Si estuviera vivo, él mejor que nadie os explicaría qué tipo de relación deberían tener España y Portugal. Nada une más a dos países que la necesidad.

--¿Cómo ve su futuro laboral?

--Tendré que hacer aquello que he dicho antes que no me gustaría hacer: alejarme de mi Valencia de Alcántara.