NATURAL DE BADAJOZ

EDAD 41 AÑOS

PROFESION ABOGADO, LICENCIADO POR LA UEX

CARGO DIRECTOR DE LA ESCUELA DE PRACTICAS JURIDICAS DE CACERES

AFICIONES EL CINE, LA MUSICA Y LA LITERATURA

La Escuela de Prácticas Jurídicas afronta un nuevo curso, ante el que su director, José Viñuelas, se muestra ilusionado y expectante porque, según asegura, aporta novedades que redundarán en una mejor formación de los alumnos. Dirigida a la formación de licenciados en Derecho para el ejercicio de la abogacía, para su director los cursos que imparte se hacen hoy casi obligados para todos aquellos que quieren dedicarse a esta profesión. Para este curso, que se iniciará el próximo día 16, las matrículas están ya abiertas y Viñuelas está convencido de que la evolución será al alza, con más incorporaciones.

--¿Qué fin tiene esta escuela?

--La idea de la escuela es formar abogados, dar esa formación práctica que no se adquiere en la universidad. Lo hacemos a través de un amplio grupo de profesores en los que están representadas todas las actividades que tienen que ver con el entorno de la actividad profesional de la abogacía, y todo con un enfoque eminentemente práctico que incluye asistencia a juicios, a detenidos del turno de oficio, prácticas en despachos...

--¿Es requisito imprescindible pasar por la escuela?

--En general el número de colegiaciones ha descendido de una manera importante, aproximadamente se vienen a colegiar entre 25 y 30 letrados en el colegio de Cáceres a lo largo del año, y esto hace que los despachos de abogados demanden jóvenes titulados para incorporarlos y suele ser requisito imprescindible que estén titulados por la escuela de prácticas jurídicas. No es un requisito legalmente exigible, pero sí en la práctica.

--O sea que no es exigible, pero se está convirtiendo en fundamental para que un licenciado en Derecho pueda llegar a ejercer. ¿Esto no podría suponer una crítica, el que después de cinco años de universidad tengas que pasar por la escuela?

--El 80% de los abogados que ejercen pasan bien por escuelas de prácticas jurídicas o bien por pasantías, sólo hay un 20% que se lanza a ejercer sin tener esta formación, que se requiere porque la Facultad de Derecho no es la facultad de la abogacía.

--¿Quizás lo que supone la escuela es una vía abierta a la formación para quienes no tengan la posibilidad de ir como pasantes, o que no conozcan a abogados o despachos? --De hecho por eso surgen un poco las escuelas. En España, la vía tradicional de incorporarte a la abogacía era la pasantía, entrar como tal en un despacho, al que después podías incorporarte o bien fundabas tu propio despacho. Pero con el boom de la incorporación a la universidad, a finales de los 70, el número de alumnos que salían de las promociones era tan elevado que el mercado no podía absorberlos. La pasantía resulta ya insuficiente para ofrecer formación a todos esos abogados. Es entonces cuando desde el Consejo General de la Abogacía se incentiva la creación de escuelas de prácticas jurídicas como medida alternativa para todos los licenciados.

--¿Usted anima a los licenciados a pasar por la Escuela de Prácticas Jurídicas?

--No sólo les ánimo sino que creo que la situación que existía hace unos años de pesimismo hacia las posibilidades de salir adelante como abogados para los jóvenes licenciados, y que hacía que muchos de ellos desistieran y buscaran otros caminos, normalmente en la mayoría de los casos la oposición, se ha acabado. A mí la experiencia me demuestra que hoy por hoy hay más facilidad para que esos jóvenes licenciados puedan incorporarse a la abogacía. No es fácil, pero desde luego la situación ha mejorado sustancialmente con respecto a años anteriores y creo que va a mejorar más.