Numerosos jóvenes incontrolados asaltaron en la madrugada del jueves al viernes los autobuses nocturnos que cubrían la ruta del ferial al centro, abriendo las puertas traseras de los coches, dando empujones a las delanteras e intentando acceder sin abonar el billete, según informó la policía local. El cuerpo municipal cifra en más de 4.000 las personas que se dieron cita para beber y divertirse en el recinto de la carretera de Mérida.

Hasta la 1.45, la denominada fiesta de la primavera trascurrió con normalidad. A partir de esta hora, fue necesaria la presencia de varias dotaciones policiales en la parada de autobuses por los altercados de orden público que se estaban produciendo.

Debido a la presión de grupos incontrolados, varios autobuses optaron, con la ayuda de la policía, por cerrar sus puertas y regresar vacíos al centro.

La situación se fue normalizando y el macrobotellón finalizó hacia las 4.20.

La policía también tuvo que desalojar a las 4.25 a un grupo de franceses que intentaban subir al caballo de la estatua de Hernán Cortes para fotografiarse.