El Juzgado de lo Social 1 de Cáceres ha declarado improcedente el despido de un joven discapacitado que desde hacía cuatro años trabajaba, como peón de jardinería en parques cacereños, a través del Centro Especial de Empleo San Jorge, de la Asociación de Padres para la Integración de Cáceres (Aspainca).

El magistrado Mariano Mecerreyes, titular del juzgado, establece en su sentencia que Aspainca-CEE San Jorge deberán optar por "la readmisión del despedido en las mismas condiciones que tenía", o pagarle 4.636 euros --2.172 euros de indemnización más 2.474 de los salarios pendientes desde su despido--.

Tomás Esteban Iglesias, de 27 años y un grado de discapacidad global declarado por la Junta de Extremadura del 59%, recibió la carta de despido el pasado 6 de octubre, cuatro días después de reincorporarse a su puesto de trabajo tras una baja médica.

El despido sorprendió a los cuidadores del joven, que decidieron demandar a Aspainca-CEE San Jorge. Para ello, la comisión tutelar de adultos de la Junta de Extremadura --tutor legal del joven-- nombró a la abogada Margarita Abella para llevar el caso. Esta explicó ayer a EL PERIODICO que primero se intentó la conciliación, "pero ante la falta de disposición de Aspainca a llegar a acuerdo", se presentó demanda en el Juzgado de lo Social "solicitando que el despido de Tomás se declarara nulo, o subsidiariamente improcedente, por entender que se habían inculcado derechos fundamentales de este joven discapacitado".

El juzgado declaró la improcedencia, y aunque Aspainca había comunicado que optaría por indemnizar, finalmente ha decidido recurrir la sentencia ante el TSJEx, " lo que significa que Tomás estará años sin poder volver al trabajo, que es lo que quiere, y sin ser indemnizado".