El joven que el pasado sábado degolló a su expareja se encuentra ya en el Centro Penitenciario de Cáceres. El juez titular del Juzgado número 6, al que se ha pasado la instrucción de esta causa por ser considerado un caso de violencia de género y ser este el juzgado competente en la materia, decretó ayer su ingreso en prisión, comunicada y sin fianza, "por entender que concurren todos los requisitos exigidos para esta medida", indicaron a EL PERIODICO fuentes jurídicas.

El abogado del acusado, Fernando Agorreta, pidió su internamiento en un centro psiquiátrico, "pues entendemos que lo que realmente necesita esta persona es tratamiento psiquiátrico urgente", pero el juez denegó esta medida.

Por ello, el letrado anunció ayer mismo que recurrirá el auto de prisión provisional. Lo justificará, adelantó, en lo que ya señaló ayer, en su consideración de que el acusado de este delito --puede ser calificado de asesinato o de homicidio-- "es una persona que sufre graves problemas de alteración psíquica, que al parecer, y según la familia, está diagnosticado desde hace unos tres años de esquizofrenia, y lo que requiere es tratamiento, su internamiento en un centro psiquiátrico".

Considera su abogado defensor que así debe ser, "provisionalmente --añadió-- y a resultas de que en el juicio se acredite, que es lo que intentaremos demostrar, que efectivamente mi defendido es inimputable, que está exento de responsabilidad criminal porque cuando ocurrió el hecho estaba bajo una gravísima alteración, que él no fue nunca consciente de lo que hacía ni porque lo hacía".

Como ha venido publicando este diario ayer y el domingo, Issam G., de 25 años y natural de Rabat, degolló el pasado sábado por la tarde a Antonia Pérez Moreno, casareña de 37 años con la que había mantenido una relación sentimental --según hermanos del acusado aún la mantenían y según la familia de la víctima ésta había roto con él hacía algunas semanas--, y poco después se entregó a la policía.

DECLARACION Tras pasar dos noches y casi dos días en dependencias policiales, a primera hora de la mañana de ayer Issam G. pasó a disposición judicial. Aunque del caso se había hecho cargo en un principio el Juzgado de Instrucción 2, que era el que estaba de guardia el pasado sábado, día del trágico suceso, fue el juez titular del número 6, Juzgado de violencia de género --violencia contra las mujeres-- el que le tomó declaración.

Estuvieron presentes el fiscal, una médico forense y su abogado, y pese a que la declaración se prolongó durante casi dos horas, sobre ésta su abogado indicó: "Ha sido imposible hacerle hablar, prácticamente no ha dicho nada, ni porqué lo hizo, ni qué sintió... Está como ido, se le nota ausente, y no da ninguna explicación de nada, lo único que repite una y otra vez es "la he matado", "la he matado", que es lo que le dijo hace casi 48 horas a la policía cuando se entregó.