La Consejería de Cultura ha iniciado el expediente de declaración de Bien de Interés Cultural para el poblado de Aldea Moret. El Diario Oficial de Extremadura (DOE) de ayer recoge la resolución de la consejera Leonor Flores que ´blinda´ al conjunto frente a intervenciones urbanísticas en la zona y que abre la puerta a la puesta en marcha de la actuación de regeneración comprometida por el Ministerio de Cultura. El departamento que ahora dirige Angeles González Sinde había exigido esta declaración como requisito imprescindible para incluir al poblado en su plan especial de recuperación de áreas industriales y destinar fondos a su rehabilitación, según el compromiso que adquirió con el Ayuntamiento de Cáceres en enero del 2008, tal y como anunció entonces la alcaldesa, Carmen Heras.

Ya entonces no se dudaba de que la declaración como BIC se lograría, porque la Junta de Extremadura se había comprometido a proteger esta zona, sin embargo el proceso se ha ido dilatando, hasta que ahora, dos años después, se ha incoado el expediente que equipara al poblado minero .

El conjunto minero quedará incluido en la categoría de Lugar de Interés Etnológico: "espacios naturales, construcciones o instalaciones industriales vinculadas a formas de vida, cultura y actividades tradicionales del pueblo extremeño, tales como antiguos almacenes, fábricas, elementos distintivos como chimeneas, silos, puentes, molinos", según reza la declaración. Cultura interpreta que las edificaciones, las oficinas, los pozos, las galearías las viviendas, las minas, los almacenes, el malacate y el resto del conjunto minero "configuran una muestra coherente y completa de una actividad industrial extractiva de la fostorita, en la que se conservan todos los componentes materiales y funcionales, así como su articulación". La resolución destaca que el conjunto constituye "un singular y relevante ejemplo de alto nivel patrimonial tanto por su valor testimonial como por su singularidad arquitectónica" y por ello lo considera "digno" de alcanzar la declaración como Bien de Interés Cultural.

El terreno en el que se ubica geográficamente el conjunto de Aldea Moret se encuentra a unos 800 metros de la bifurcación de las carreteras de Mérida y Badajoz, a ambos lados de la carretera que une ambas vías y da acceso a la urbanización La Cañada. La zona protegida incluye, no solo el antiguo poblado, sino también cuatro de los antiguos pozos de extracción --La Abundancia, La Esmeralda, María Estuardo y San Salvador--, el almacén de superfosfatos y el edificio La fosa, el embarcadero, las instalaciones productivas, la factoría, la piscina y depósito de agua, la iglesia de San Eugenio y el malacate.

ESPERADO Esta declaración era esperada desde hace tiempo en el Ayuntamiento de Cáceres. "Llevábamos bastante tiempo diciendo que la declaración era inminente, pero no llegaba", reconocía ayer el concejal de Innovación y Fondos Europeos, Víctor Santiago. Esta semana se reunirá con la alcaldesa y abordarán esta cuestión para reanudar los contactos con el Ministerio de Cultura. "Las circunstancias han cambiado respecto al momento en el que el Ministerio formuló el compromiso", reconoció Santiago, que se refirió a la actual situación de crisis económica, aunque señaló: "está muy interesados en el proyecto". La situación económica puede retrasar una llegada de fondos que los técnicos del Ministerio ya aventuraban que debería ser elevada en la visita que realizaron al conjunto en abril del 2008.

En todo caso, tras hablar con le Ministerio de Cultura y antes de iniciar cualquier intervención, lo primero será convocar el concurso para redactar el plan director que debe definir la filosofía de la intervención y el orden de prioridades. El edil recordó que ya se han llevado a cabo dos intervenciones en la zona, "el embarcadero y la que se está haciendo en el almacén de fosfatos" y señaló que en ese sentido el plan director "ayudará a gestionar el espacio o establecer rutas...", explicó.

"Va a ser un año muy importante sobre este tema", reconoció Víctor Santiago. No en vano, en los próximos meses está previsto que concluya la redacción del plan especial de intervención en la zona en el que trabajan los arquitectos que ganaron el concurso internacional de arquitectura Europan. El ayuntamiento y la Consejería de Fomento participan en este proyecto que llevará a cabo otras iniciativas de intervención para regenerar la zona.