El juzgado de lo Contencioso-Administrativo anula, en una sentencia que ayer conoció la junta local de gobierno, la resolución de la alcaldía que adjudicó a la sociedad Torosanda la organización de los festejos taurinos durante la temporada del 2004. Pero lo relevante del fallo, dado que el contrato con Torosanda finalizó hace año y medio, es que obliga al consistorio a indemnizar a Sarot Asesores, empresa que gestionó la plaza de 1997 al 2003. La sentencia no especifica la cantidad de la indemnización al establecer que su "determinación se hará en ejecución de sentencia", fallo que no es firme. El gobierno local acordó ayer presentar un recurso de apelación.

Sarot fue una de las tres empresas que se presentaron al concurso que convocó el consistorio a finales del 2003 para la gestión de la plaza durante el 2004. Las otras dos fueron la unión temporal Circuitos Taurinos-Roberto Espinosa y Torosanda. El juzgado considera en su sentencia que el consistorio no tuvo que admitir las ofertas de Torosanda y de la unión temporal. Y concluye que se debe indemnizar a Sarot "por los beneficios que ha dejado de percibir por no haber sido la adjudicataria del contrato".

El juzgado argumenta que las dos ofertas no reunían los requisitos exigidos para presentarse al concurso. En el caso de Torosanda considera que todos los documentos con los que se pretendía acreditar su experiencia y su actividad se referían a sus dos socios, Francisco Dorado y Manuel Angel Millares, precisando que "quien participaba en el concurso no eran los socios, sino la sociedad". El juzgado valora, en respuesta a los argumentos del ayuntamiento, que no se puede interpretar que había una sucesión de empresas y una continuad en la actividad profesional.

Sarot también tiene recurrido el concurso que se convocó en el 2005, al que no se presentó, que se adjudicó a Intertauro.