Aníbal Ramírez, uno de los propietarios del bar Nuevo Rialto, también ubicado en la Concepción, alaba el estado en el que ha quedado la plaza, pero incide en la necesidad de obtener un permiso municipal para organizar actividades de diversa índole. "Nunca nos dejan hacer nada. El propio ayuntamiento es el que nos pone trabas. No podemos organizar cosas, y eso que somos parte de Ciudad Monumental...", se resigna. También se refiere Aníbal al pasado Womad al recordar la negativa que obtuvieron cuando solicitaron poner música en directo. "Tampoco nos dejaron sacar bafles a la calle", reitera.

Desde Nuevo Rialto reclaman también más igualdad de oportunidades para todos los hosteleros de la ciudad y proclaman su disposición a colaborar en cualquier actividad que se organice y que pueda resultar beneficiosa. Condenan también la cámara de tráfico instalada en la zona al afirmar que "la han fastidiado poniéndola aquí", y concluyen como empezaron. "La plaza está bonita pero no se usa...".