"Los juegos activos ganan terreno a costa de los sorteos de lotería de toda la vida. Aunque las probabilidades de que toque son menores, los premios son mucho mayores. La gente lo que busca es, simplemente, hacerse millonario. Salir por la puerta grande". Así sintetiza Alfonso Rincón, de la administración de loterías número 4, en Gil Cordero, la situación actual de la demanda de lotería en la ciudad. También afirma que el boom de internet ha perjudicado su negocio, ya que "nos han tenido las manos atadas. La LAE no daba autorización para vender, aunque hay gente con más medios que ha buscado fórmulas alternativas", comenta. También lamenta que el organismo haga "competencia, realmente, a sus puntos de venta".