Cuando uno recibe un premio siempre dice que no lo espera, pero en el caso del Antonio Ballell es verdad. Ni siquiera sabía que sus profesores habían presentado su «brillante» tesis de máster al certamen. Hace apenas un mes se resolvió el fallo del jurado y aún no puede ocultar su entusiasmo. «Ha sido una gran alegría». A sus 23 años, el biólogo cacereño especializado en paleontología ha sido distinguido con el premio Curry otorgado por la Geologists’ Association of London (Sociedad Geológica de Londres), uno de los galardones más prestigiosos en ciencias de la tierra, por su tesis sobre los primeros dinosaurios y la evolución de los cocodrilos.

La entrega será el 3 de mayo en Londres y reconoce a este diario que está «nervioso» por la gala, donde no titubea ni un segundo es en su ámbito de estudio. El joven atiende a este rotativo en una pausa en su despacho de la Universidad de Bristol, donde ha desarrollado el trabajo que le ha valido el reconocimiento en su campo. El cacereño estudió Biología en la Autónoma de Madrid y se marchó hace año y medio a Reino Unido con una beca de La Caixa para cursar un máster. Ballell ya era entonces recomendado por sus profesores de facultad en España. De hecho, confiesa que ellos le animaron a especializarse en paleontología. «Siempre me interesó la evolución», añade. De momento, seguirá en Bristol y será ahí donde desarrollará su doctorado. Para ello usará las mismas técnicas y seguirá investigando sobre dinosaurios. Lo que no tiene claro es dónde acabará. «Lo ideal sería volver a España», pone de manifiesto. Lo de volver a Extremadura lo ve más difícil. «En Cáceres no hay facultad de Biología y en Badajoz, que son muy buenos, creo que no trabajan con reptiles». En cualquier caso estudia opciones y lamenta que la situación de la investigación en España no se asemeje a la británica. «Aquí hay unos recursos fantásticos, se deposita mucho dinero en las universidades, en España hay un déficit tremendo, un país tiene que cuidar la investigación y la ciencia», defiende.

En cualquier caso, la situación del país en el que investiga ahora el cacereño también se rodea de incertidumbre con el Brexit, el proceso de salida de la Unión Europea de Reino Unido. En ese sentido, tiene claro que afectará seriamente a la educación. «Las universidades y la investigación sufrirán un grave golpe con el Brexit». Del mismo modo, asegura que en su campo ya se advierten las consecuencias. «Se nota en la afluencia de estudiantes, hay un clima de inseguridad y no quieren venir a un país en el que no saben qué pasará en dos meses».