No hay doblez en su delatadora sonrisa ni tampoco en su mirada de ojo azul que convierte a su grupo de rock, Xoia Mai, en una postal metida en un Cáceres que no se resiste a mutilar la música. Reivindicativa, combativa, soñadora... Detrás de Laura hay mucho más que una princesa de rubia cabellera.

--Solo he tardado cinco meses en alcanzar mi anhelo...

--Ya lo ha conseguido.

--Ver abrazada a una almohada a la ninfa del bosque musical de Cáceres...

--No creo que sea para tanto (dice con una sonrisa).

--La escuché en el Womad y me dio el subidón...

--¿Qué se tomó aquel día? (carcajadas). Hay gustos para todos, igual que había gente que no se movió a usted le dió el subidón, me alegro.

-- En el camino de una fría soledad, vas buscando un lugar donde hallar una sola oportunidad que te permita escapar, y escapar , cantaba aferrada a su micrófono, ante miles de personas...

--Esa canción se titula La fábula y recrea el cuento de la hormiga y la cigarra contado al revés, en este caso gana la cigarra, por vaga y por perra, la hormiga se muere por trabajar tanto y se queda con todo la otra. Habla un poco de eso, de que a veces no hace falta tanto colegio privado, tanta disciplina, tanto dinero, porque luego vendrá uno detrás tuya y lo más probable es que se quede con todo lo que tú has cosechado.

--¿Cómo hizo para que entonces no le temblara el pulso?

--Cuando me subo a un escenario me siento tan respaldada por mis compañeros y hay tanta complicidad que me transformo, es como si fuera otra persona, como si de repente estuviese en otro mundo, me siento más crecida, porque luego, abajo, soy más cortada, mi misma sonrisa me delata.

--Y aquel día me pareció más princesa que nunca...

--No me veo como una princesa, me veo una chica normal y corriente. Quizás, mi aspecto suponga un contraste dentro de un grupo de rock, pero simplemente hago un trabajo que me encanta, me gusta, y me ayuda a realizarme como persona.

--Con sus medias rockeras y su melena rubia...

--Ese es el contraste al que me refiero, ese el juego, la típica niña rubia con los ojos azules, anda qué buena es , ¡pues no soy buena! Bueno, ¡que sí soy buena!, que me transformo completamente, me vuelvo más atrevida, más reivindicativa, expresando las quejas que transmiten muchas de nuestras canciones.

--Y fíjese que la encontré como lo menos parecido a una chica folk macarra...

--(Sonríe). Es que no soy ni folk ni macarra.

--Más bien dulce...

--Con ciertas personas y en ciertos momentos. Creo que soy simplemente espontánea.

--Aunque contestataria...

--Las canciones escritas por Javi y que yo canto me parecen perfectas, porque tocan muchos temas: maltrato de la mujer, medio ambiente, homosexualidad... muchas cosas que poco a poco con el tiempo se están solucionando gracias a... a Dios, a Alá, punto, punto, punto. Por lo demás, suelo ser muy bien hablada, no suelo discutir, aunque cuando tengo que quejarme me quejo.

--Una mujer sin doble moral, que es lo mejor a lo que uno puede aspirar a ser...

--No tengo doble moral ni dos caras. Pero creo que sé estar en cada sitio y en cada momento; con mi familia soy educada, con mi grupo más loca, y con mi novio, más dulce (risas).

--Una mujer sin miedo a soñar...

--Si no sueñas no te puedes plantear ningún objetivo en la vida. Para llegar a una meta tienes primero que haber soñado con llegar a ella.

--A veces con aire de bohemia y melancólica...

--(Sonríe de nuevo). ¿Bohemia? No sé. Sí... suelo ser un poco pastelosa a veces.

--Sin miedo a enseñar sin tapujos su corazón...

--Me gusta mostrarme alegre, pero abro mi corazón a determinadas personas, no al primero que me pase por delante.

--Sin miedo a amar...

--¿Por qué le vas a tener miedo a amar?

--Porque muchos se empeñan en poner barreras al amor...

--Las barreras se las pone uno mismo, no te pueden obligar a ponerte una barrera porque si la quieres romper la rompes.

--¿Pero usted cree en el sí para toda la vida?

--Depende en qué cosas. No hay un sí rotundo que dure para siempre, todo te lo tienes que trabajar porque todo se acaba, todo. Puedes dar un sí ahora pero no tiene por qué ser ilimitado, puede tener, ahí, su final, en la otra esquina.

--¿Qué hacer cuando él se escapó de entre sus sábanas?

--Dormir cinco minutillos, pegarme una ducha y salir a la calle a dar un paseo con mis perros (más risas).

--¿Cuánto tiempo le costó encontrar su tribu?

--¿Mi tribu, mi sitio en este mundo? Me lleva costando dos años, cuando por suerte descubrí a Xoia Mai, ¡y lo que me seguirá costando!

--¿Cómo se sobrevive a ser cantante en una ciudad donde han mutilado a la música?

--Se sobrevive mutilada. Te falta algo. Si no tienes espacio para recrearte y si no hacen nada para que tú avances es como si te faltase algo, como si te cortasen la mano y no pudieras coger el micrófono.

--Un Cáceres donde ponen multas por cantar, que es lo más surrealista, lo más triste, lo más extraordinariamente trágico...

--Y lo más vergonzoso, lo más lastimero, capital cultural de la rotonda 2016...

--Laura, para terminar, ¿me dedica una canción?

--Nacidos para perder , que dice: En tu mente está, no intentes disfrazar, soy solo lo que ves .