Falleció en mayo del 2013 con solo 20 años tras perder la batalla contra el cáncer, pero su arte nunca perecerá. Gemma Granados (Casar de Cáceres, 1983) recibirá hoy otro homenaje póstumo más con la inauguración, a las 21.00 horas, de la nueva sede del colectivo Lemon y Coco en la plaza Marrón, donde se expondrá la muestra 'Gémmico' que recoge varias de sus obras.

La exposición, que podrá visitarse hasta el 9 de abril, trata de recuperar una faceta poco conocida de Gemma a través de ocho obras realizadas entre 2006 y 2007 que presentan una gama de colores basada en tonos ocres y negro y tienen como nexo común la presencia de textos indescifrables escritos en gémmico , un lenguaje creado por Gemma a través de la modificación de nuestro alfabeto y que solo ella era capaz de entender. Precisamente una de sus obras escritas en gémmico recibió el primer premio en el I Certamen Juan José Narbón y fue adquirida por Caja Extremadura.

Gemma se definía a ella misma como "dibujanta, pintadora de paredes y customizadora de basura", y sus coloridos personajes conocidos como pusinky , una palabra eslovaca que significa 'besos', llegaron a países como Holanda, Cuba, Mozambique, Turquía, Zambia o Costa Rica, entre otros. Estudió Bellas Artes en Salamanca y también cursó varias asignaturas en la Universidad de Belgrano, Argentina.

Hace ya dos años, la remodelación del parque infantil de Veracruz también le rindió tributo con la creación de un mural en su honor. A partir de esta noche, los cacereños podrán recordarla un poquito más.