Nadie niega que una discapacidad visual es una seria complicación para desarrollar una vida normalizada, pero con trabajo, y sobre todo empeño, puede conseguirse. La evidencia tienen un nombre: Leticia Ventura. A sus 28 años ya es directora de la agencia de la ONCE en Cáceres tras años de formación, experiencia y una voluntad de hierro.

Natural de Fuente del Maestre (Badajoz), nació con un glaucoma que le limita notablemente la visión, aunque mantiene cierto ‘resto visual’ al que Leticia saca mucho provecho. Estudió en un centro escolar ordinario con materiales adaptados y pronto manejó el braille a la perfección con su máquina Perkins, siempre supervisada por una maestra del equipo educativo de ONCE. Luego llegó la facultad: estudió Periodismo en la Universidad de Sevilla con libros en braille, primero en una residencia y luego en un piso donde se manejaba sin ayuda.

«Iba y venía por la ciudad una vez que los técnicos de la ONCE me ayudaron a situarme en los recorridos más habituales durante los primeros días en Sevilla», relata. Y sí, claro que sus padres eran protectores, pero ella consiguió que lo entendiesen. «La familia es muy, muy importante para nosotros, pero también debe darnos libertad», sostiene Leticia.

Al acabar la carrera, cursó un Máster de Periodismo Multimedia en Extremadura y entró a trabajar en la venta de productos de ONCE, que le brindó un buen bagaje en cuanto al trato diario con el público en la calle. Aprovechó la convocatoria de unos cursos en Madrid para la promoción interna en la propia ONCE y salió con capacitación para desempeñar puestos de responsabilidad. En mayo de 2017 se incorporó a las oficinas de la organización en Valencia (Lliria y Alzira), hasta que la llamaron para ocupar la dirección de la agencia en Cáceres, ciudad en la que ya se desenvuelve con evidente soltura.

«Además de normalizar nuestras vidas, la ONCE permite una movilidad que nos enriquece porque te vas nutriendo de la relación con los afiliados por donde quiera que vas», agradece Leticia, ahora satisfecha con su nueva etapa en Cáceres, una ciudad tranquila donde ya se siente como en casa.