Los tiempos cambian, las mentes evolucionan y cada día son más los hombres que le toman gusto a la cocina, incluso quieren lucirse con sus artes culinarias. Pero la mayoría, todo hay que decirlo, llevan años de retraso. Pensando en ellos, el club social El Encinar ha puesto en marcha un socorrido curso que tan pronto les enseña a preparar un caldito de verduras como un sabroso carpaccio o unos crepes de aquí te espero. Y vaya si están aprendiendo. "Les enseñamos las técnicas culinarias más importantes durante un mes, los lunes y martes. El curso se repetirá en marzo para todos los interesados", explica la organizadora y responsable del club, Maribel Blanco.

Los 16 alumnos, conducidos por el chef Antonio Durán, ya han aprendido la asignatura de los caldos (caza, ave, foume , hortalizas...), las cremas (dulces, saladas, pastelera...), tratamiento del pescado, preparación de los huevos, repostería salada y ahumados. Lo mejor de las clases llega justo al final, porque todos dan buena cuenta de los platos para saborear sus evoluciones.

CLASE MAGISTRAL Y del fogón al escenario. El Gran Teatro recibió ayer la visita de 900 escolares de varias localidades cacereñas con motivo del nuevo concierto didáctico a cargo de la Orquesta de Extremadura, con Carlos Checa como director invitado. Los chavales se acercaron a la música clásica de la mano de compositores como Henry Purcell, Johann Sebastian Bach, Wolfgang Amadeus Mozart, Johannes Brahms, Georges Bizet y J. Strauss, entre otros.

Finalizamos con la Asociación de Discapacitados Extremeños (Adex), que acaba de poner en marcha un centro para la atención integral de personas aquejadas de deficiencias sensoriales, situado en ronda de la Pizarra. Los alumnos, alrededor de medio centenar, han recibido un encargo muy especial que les tiene más que ilusionados: la confección de todos los atrezos medievales del desfile carnavalesco que recorrerá mañana la ciudad, desde caballos hasta cascos, armaduras, lanzas y escudos.