La llegada de 611 alumnos al Centro de Formación de Tropa 1 (Cefot) favorece el aumento de las contrataciones en el centro. Es lo que ha ocurrido en la cafetería, que cuenta desde el lunes con cuatro personas más en su plantilla, mientras que durante el año y medio de cierre temporal del centro por falta de alumnos solo hubo dos. La llegada de tropa ha obligado también a abrir la parte del bar a la que asisten oficiales y suboficiales, cerrada durante el pasado año (estos acudían a la cafetería de tropa porque fue la única que se dejó abierta al ser más grande).

La mayoría de los contratados son empleados despedidos tras el cierre temporal y están a jornada completa, por turnos. "Estamos pendientes de cómo se desarrollen las cosas porque nuestra intención es contratar a más personas", dijo el empleado del bar, Manuel Vivas, que se mostró contento por "comenzar a rodar de nuevo".

En la cocina, también más plantilla. De lunes a viernes trabajan 20 personas entre mañana y tarde; los fines de semana y festivos la cocina cuenta con 16 empleados. Ayer se abrieron todos los comedores, en los que los 611 alumnos que se instruyen para soldados almorzaron palitos de merluza, macarrones con carne picada, filetes de lomo con patatas fritas, fruta y lácteos.

Lejos han quedado los años de oro del Cefot (antes CIR y Cimov), en los que llegó a recibir 6.000 alumnos. De hecho este año solo hay abiertas tres compañías (edificios en los que duermen los soldados, divididos este año en grupos de 200), hubo periodos en los que se abrieron hasta ocho diferentes. Pero los 611 son suficientes para mantener viva la actividad militar, que deja en la ciudad 5,2 millones de euros al año, según la Federación Empresarial Cacereña. El Cefot es considerado, para muchos, la empresa más grande de Cáceres.

Al centro llegaron el lunes 611 soldados, de entre ellos 26 son mujeres y solo dos de nacionalidad sudamericana. Ayer fue el segundo día en el cuartel y, aunque hasta la próxima semana no comenzarán la instrucción, sí que tuvieron un primer contacto con la disciplina. La diana sonó a las 07.00 horas, momento de levantarse, hacer la cama, asearse y uniformarse y a las 07.30 el desayuno.

A las 08.00 forman y comienzan las actividades, ayer estas se centraron en recibir charlas sobre las normas del cuartel, como las horas de salida (de lunes a jueves la hora máxima de llegada son las 23.45 horas y el sábado las 00.00 horas), manera de hacer las camas y de ordenar los armarios, vestimenta a utilizar en cada momento, formas de aseo y aspecto físico (pelo corto, barba de 3 centímetros, las mujeres deben llevar el cabello recogido sin teñir y maquillaje natural, entre otras cosas).

También se les tomaron las medidas para los trajes (visten el militar árido), las gorras y las botas y se realizaron las fotos para su carnet de militar. Les harán a medida el traje de instrucción, con el que jurarán bandera el 21 de diciembre. Los nuevos soldados estarán en la ciudad hasta el 21 de febrero. Después ellos partirán hacia sus destinos y el Cefot, si no hay nuevas noticias, volverá a quedarse vacío.