"En el estanco se sigue vendiendo más o menos igual, aunque hay mucha gente que está más apuradilla y cuando esto pasa se termina recortando de los vicios. Cada vez que hay una subida el comprador se retrae. Por lo general los clientes se están tirando más al tabaco de liar, aunque la última subida afecte mayormente a éste. El que antes se llevaba tres paquetes ahora se lleva uno o se pasa a otro tipo de tabaco. Consumen algo más barato. Ahora bien, lo que no veo nada lógico es lo de hacer las cajetillas genéricas, porque no tienen ningún sentido".