Madrid y la organización del Womad acordaron ayer la celebración de un festival multicultural en la Casa de Campo en el marco de las fiestas de San Isidro, entre los días 20 y 22 de mayo, apenas dos semanas más tarde del que está previsto en Cáceres. Después de trece ediciones, la ciudad perderá la exclusividad de este evento musical y étnico en la Península (otro certamen tiene lugar hace diez años en Las Palmas, y Córdoba fue sede durante algunos años).

La responsable de Womad en España, Dania Dévora, preguntada ayer si la cita de Madrid puede poner en entredicho la de Cáceres, máxime teniendo en cuenta que aún no hay acuerdo definitivo, declaró a EL PERIODICO que "no afectará en absoluto al festival cacereño". Dévora insistió en "la importancia" que tiene para su firma la sede extremeña y destacó su "deseo" de que siga como "ciudad Womad".

Además, la responsable avanzó que el proyecto presentado el pasado 30 de noviembre al Consorcio Gran Teatro supone un "regreso del festival a su idea original, al modelo primario que tanto gustó e identificó a Cáceres con los valores Womad, y que consideramos muy favorable". Esta vuelta al casco viejo (no quiso aclarar cuántos actos retornaría o si alguno continuaría en el ferial) es, según Dévora, "el planteamiento que se merece la ciudad", ya que el recinto ferial "se aleja bastante de la filosofía del certamen".

"MADRID NO INFLUIRA" Según ha podido saber este diario, en la redacción del proyecto del festival cacereño 2005 ha tenido mucho que ver el propio Peter Gabriel, músico y fundador de Womad. El Consorcio Gran Teatro --Junta, ayuntamiento, diputación y Caja Extremadura-- se reunirá en dos semanas para estudiarlo y contestar a la organización. "En cualquier caso habrá que llegar a un acuerdo consensuado, porque consideramos que el certamen es indispensable para Cáceres, seña y aval de su dimensión cultural, de su espíritu y sus valores", explicaron ayer fuentes del consorcio.

De hecho, este órgano ni siquiera considera que el festival de Madrid reste público al de Cáceres. "Es perfectamente lógico que Womad busque otros acuerdos y hace bien en sellarlos. Pero este festival tiene un público itinerante que asiste a todas las citas, incluso podrían venir más personas que no han acudido a otras ediciones, al reforzarse el calendario en el país", indican las citadas fuentes.

En el mismo sentido se expresó ayer la concejala de Cultura del ayuntamiento, Cristina Leirachá, miembro del consorcio. "No creo que Madrid influya en la cita cacereña ni la acabe perjudicando, al contrario", dijo. En cuanto al posible retorno de actos al casco viejo, Leirachá se mostró prudente: "Primero hay que velar por la seguridad de los asistentes, y en todo caso lo tendremos que estudiar en la próxima reunión del consorcio". Cabe recordar que el festival salió de la zona centro debido a la gran cantidad de público que llegó a reunir, una multitud que no permitía garantizar una actuación rápida en caso de riesgo.

El nuevo festival tomará el nombre de la ciudad, Womadrid, y en principio tendrá un formato parecido al de Cáceres: tres escenarios simultáneos de danza y músicas, una carpa con talleres, un mercadillo y una muestra de gastronomía.