La ampliación en media hora del horario de cierre de los bares ha vuelto a generar críticas en el seno de la Agrupación de Asociaciones de Vecinos de Cáceres por los efectos de ruido y suciedad que ello provoca en la barriada de La Madrila. Desde el pasado 24 de diciembre hasta el próximo 6 de enero, ambos inclusive, los bares cierran los viernes, sábados y vísperas de fiesta a las 02.30, las discotecas a las 05.30 y los bares especiales a las 03.30. El problema principal viene causado por los bares normales, que cuatro horas después del cierre vuelven a reabrir, es decir a las 06.30, alargando la música hasta bien entrada la mañana.

Miguel Salazar, presidente de la Agrupación Vecinal y de la Asociación de Vecinos de La Madrila, aseguró ayer que este tipo de bares están manteniendo su actividad hasta las 09.30 y diez de la mañana. Salazar, que puso como ejemplo la situación que se ha vivido durante este pasado fin de semana, comentó que la movida ha vuelto a causar efectos negativos en el barrio: "acumulación de basuras y ríos de orín y porquería". El dirigente vecinal añadió que ante esta situación la gente "opta por desaparecer y marcharse de sus casas o por no abrir las ventanas".

Salazar volvió a reclamar a las autoridades locales y, especialmente, a las regionales, medidas "que pongan cerco, orden y un límite", sentenció Salazar, quien comentó que ya puso sobre la mesa de la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, este asunto.