El presidente de la Asociación de Vecinos de La Madrila, Miguel Salazar, anunció ayer que en los próximos días mantendrá una reunión con el subdelegado del Gobierno en Cáceres, José Diego Santos, para exponerle la problemática de horarios que sufre la ciudad y demandarle una solución a las constantes molestias que padecen los vecinos.

Salazar llegó incluso a asegurar que José Diego se había convertido en la última oportunidad para la barriada. "Es la única persona en la que tengo alguna esperanza para que pueda solucionar la cuestión", dijo Salazar.

El responsable vecinal señaló que la reunión con el responsable gubernativo servirá "para quemar nuestro último cartucho" y comentó que si tras el encuentro no se consigue ninguna solución adoptarán medidas más drásticas. "Serán muy meditadas, serán acciones fruto de una acción muy reflexiva".

LOS RUIDOS Miguel Salazar volvió a quejarse ayer de los desmanes horarios que sufre Cáceres, de la burla en los cierres y aperturas de algunos locales y comentó que pasadas las cinco de la mañana del sábado algunos jóvenes comenzaron a tocar timbales y tambores, lo que provocó nuevas molestias al vecindario.

En los locales de copas, especialmente en las discotecas Cameron, Versus y Ara (nuevo local de moda de la movida cacereña) volvieron a originarse largas colas de jóvenes, pese a tratarse del fin de semana siguiente a las fiestas de Navidad.