La Procesión Magna es la más impresionante, lucida, elegante y concurrida que la ciudad saca a la calle, pero sólo puede verse cada cinco años. En el 2000 no salió por el mal tiempo, en el 2005 tuvo que recogerse a causa de la lluvia cuando los últimos pasos apenas habían avanzado unos metros, y en el 2010 fue tan esperada que el público abarrotó las calles para ver el largo cortejo de 3.000 personas, integrado por quince cofradías con doce imágenes al hombro. Este buen recuerdo ha comenzado a movilizar a las filas cofrades, que ya preparan la Magna 2015, pero de un modo muy especial. Será la primera con la declaración de Interés Internacional y por ello saldrán imágenes de honda devoción y notable valía artística.

En definitiva, Cáceres programa la mayor cita con su larga tradición cofrade. Las hermandades, reunidas en asamblea el pasado jueves, votaron por mayoría dos cambios significativos. Primero, según informó el presidente de la Unión de Cofradías de Cáceres, José Manuel Martín-Cisneros, la Magna se trasladará del Viernes Santo al Sábado Santo. Al parecer, la intención es distanciarla de la intensa sucesión de nueve procesiones entre el Jueves y el Viernes Santo (en lugar de coincidir con el Santo Entierro, lo hará con la procesión de Batallas), a fin de que exista mayor disponibilidad. De hecho, este cambio podría alentar por ejemplo la participación de la hermandad de los Estudiantes, que lleva décadas sin acudir a la Magna por cercanía de horarios.

También se acordó un nuevo recorrido más amplio acorde con la envergadura de la comitiva y sus pasos. Como también ha podido saber este diario, la salida se ha programado desde Cánovas, concretamente desde el chalet de los Málaga (actual sede de Cajalmendralejo). De este modo, los ciudadanos podrán contemplar el amplio cortejo cofrade en formación (casi un kilómetro) con todo su patrimonio imaginero, antes incluso de su inicio. El itinerario discurrirá por avenida de España hacia San Antón, San Pedro, San Juan, Gran Vía y plaza Mayor.

NAZARENO, LA ESPERANZA... Las hermandades quieren una Procesión Magna singular por su Interés Turístico Internacional. Desde la centenaria cofradía de Jesús Nazareno se ve con buenos ojos la posibilidad de que procesione esta talla, con más de quinientos años de profunda devoción en Cáceres. De igual modo, en la hermandad de los Ramos son proclives a unirse al gran cortejo con la Virgen de la Esperanza, nada menos. Pero todas las cofradías tienen que decidirlo antes en sus órganos internos.

Faltan siete meses para la celebración de la Semana Santa (la Procesión Magna será el 4 de abril). Entre hermanos de carga y escolta, penitentes y bandas, mantillas, religiosos y autoridades, el cortejo estará integrado de nuevo por miles de personas y tardará una hora o incluso más en pasar por cada punto del recorrido. Queda un intenso trabajo por delante.