Más de 11.000 personas, según los cálculos de la organización, recorrieron entre las 12.00 y las 20.30 horas los 1.000 metros cuadrados de superficie expositiva de la Feria de Cascos Antiguos que se inauguró ayer. 26 destinos y turoperadores y un programa de sociocultural con actividades infantiles, exposiciones, espectáculo audiovisual y música hasta el domingo integran el programa de la cita profesional y lúdica que arrancó oficialmente con la apertura de las instalaciones de la plaza Mayor. Además de Cáceres, Alcántara, Murcia, Lorca, Caravaca, las localidades portuguesas de Coimbra y Elvas, y otros destinos turísticos internacionales como Guatemala, El Salvador, Honduras, Costa Rica, Panamá, México o República Dominicana, difunden sus atractivos turísticos, junto a países como Polonia, República Checa o la Red de Ciudades Medievales.
"Queremos que Cáceres se convierta con esta feria en un gran punto de encuentro internacional de primera magnitud, con expositores de diferentes lugares", destacó la alcaldesa, Carmen Heras, en la puesta de largo de este evento en el que también estuvo, como nueva concejala de Cultura, la edil de Foro Ciudadano Carmina Santos, junto a otros integrantes de la corporación municipal. Heras destacó que todos los hoteles de la ciudad van a estar llenos en estos días y se refirió a la importancia de este tipo de eventos en la carrera por la capitalidad.
Una carpa situada en la plaza mayor, "antesala al conjunto monumental", como se refirió a ella Heras, constituye el principal escenario de la actividad expositiva. Heras recordó que el diseño inicial de al feria contemplaba que los expositores se distribuyeran por las distintas plazas de la ciudad monumental. "Por los plazos de las obras de la plaza Mayor teníamos miedo de que no hubiera sido posible terminar la primera fase --la retirada de la bandeja central--, pero hubiera sido todo más complicado para las empresas", reconoció Heras.
El propósito del ayuntamiento es que en sucesivas ediciones la feria se consolide en el mismo espacio. "La plaza Mayor siempre supone un plus, es todo más trabajoso y más delicado porque estamos en un lugar muy visitado, pero por otra parte somos conscientes de que este espacio es un reclamo importante", explicó la alcaldesa, que considera que ubicar la feria en otro espacio "sería poco inteligente". Además recordó que el turismo supone "una fuente económica muy importante para Cáceres" y se mostró convencida de que la feria funcionará. "Estamos apostando fuerte por el turismo", señaló.
Sobre la vocación de dinamización turística habló también en su intervención Estrella Díaz, de Staff Eventos, junto a Time Desarrollo Empresarial, empresas organizadoras de la feria. "Contamos con una enorme variedad de expositores y una variedad social y cultural en la programación", defendió.
EN BUSCA DEL SOUVENIR Un nutrido grupo de curiosos esperaba en la puerta de la carpa el final del acto protocolario de inauguración para iniciar el recorrido por los expositores. Miles de folletos con los atractivos turísticos, regalos --como los parasoles que regaló la Federación empresarial Cacereña-- y degustaciones de productos típicos --embutidos de Alcántara, garrapiñadas de Coimbra, crespillos de Lorca e incluso las piruletas de Cáceres 2016-- acapararon el interés de los visitantes durante toda la jornada.
Las actividades infantiles en el exterior y la zona de ´tapeo´ instalada en al foro de los Balbos fueron otros de los puntos de interés de la jornada. Los seis dinamizadores de Nutria, encargados de las actividades infantiles, entretuvieron a más de 400 niños durante toda la jornada con cuentacuentos, talleres de pintura y globoflexia. El goteo de público tampoco cesó en la zona gastronómica instalada en el foro de los Balbos, por la que pasaron entre 3.000 y 4.000 personas, según los datos de los organizadores.
