Es la tercera legislatura de José María Saponi al frente del ayuntamiento. Una nueva etapa de gobierno que en su inicio está marcada por la querella presentada por un grupo de hosteleros por la autorización dada para la instalación de una pista de verano dentro del recinto hípico, una decisión muy cuestionada por la oposición que ha denunciado la falta de documentación. Del inicio de la legislatura también destaca el anuncio de José María Saponi de que no volverá a presentarse a la alcaldía y de que está a disposición del partido si se le solicita que entre en las listas de las elecciones generales que se celebrarán el próximo año.

Hay una tercera cuestión a resaltar en este comienzo del tercer mandato de José María Saponi: el reto de conseguir que Cáceres sea capital europea de la cultura. La comisión gestora que se ha constituido para trabajar en la candidatura de Cáceres celebró el viernes su primera reunión.

¿Quiere irse al Senado o al Congreso?

-- No quiero irme a ningún sitio. Lo que quiero es que mi partido piense en mi relevo, porque son doce años en el gobierno y otros doce en la oposición, casi toda la vida dedicada a un tema importantísimo. Nadie puede pedirme más y yo no puedo pedir más. A lo mejor no debería haber dicho nada, porque eso da a entender que me voy, y yo no quiero ir a ningún sitio. Aunque es importante recordar que estoy a disposición del partido. Si la elección fuese una cosa u otra, siempre elegiría la alcaldía. Pero si son las dos, aceptaría si es beneficioso para la ciudad porque tengo un equipo que funciona. Yo lo que no quiero es que en la calle se comente que el alcalde ha engañado a la ciudadanía porque dijo que se iba a quedar aquí y se ha ido. La alcaldía es mi lugar.

Entonces, nunca se iría a Madrid si eso supone dejar la alcaldía de Cáceres

-- Yo lucharía por la alcaldía. Le recuerdo que estamos hablando de una hipótesis, porque hasta ahora nadie me ha planteado ir en una candidatura, y además es difícil que se me ponga ante esa disyuntiva. No obstante, en el supuesto caso improbable de que tuviese que dejar esto e irme a otro lugar, yo explicaría públicamente las razones y esperaría que la ciudadanía lo comprendiera.

Hablando de relevo, ¿qué le parecería que Andrés Nevado fuese su sustituto?

-- Hay mucha gente en mi partido, tanto dentro como fuera de la candidatura, y Andrés Nevado es uno de ellos, conoce la vida municipal y es una persona que se ha hecho a sí mismo, y eso es importante. No obstante, yo no soy el que tiene que designar a mi sustituto en la candidatura.

¿Es posible que alguien de fuera, sin experiencia en política local, ocupase su puesto en la candidatura a la alcaldía?

-- Sería posible. Pero a mí no me gustaría esa solución. Ahora bien, esa es sólo mi opinión.

¿Le preocupa la querella presentada por los hosteleros por la cesión del hípico?

-- No. Me preocupa más la incomprensión. Lo malo es judicializar la vida política. Los asuntos políticos deben resolverse en el terreno político. La actuación del ayuntamiento en el hípico, desde que se abrió en el año 1988, ha sido siempre igual. Cada vez que un colectivo quería organizar un concierto, fiesta o actividad en el hípico, se ha autorizado. Lo que también ha pasado es que cuando una cosa resulta, todos quieren entrar, y en ese momento ya no podía ser porque no cabían más. No ha podido haber ni prevaricación, ni una atención especial a unos en detrimento de otros. La prevaricación es una actuación de la administración que beneficia a unos y perjudica los intereses de otros a sabiendas de que lo estás haciendo, y eso no es lo que ha sucedido en el recinto hípico, donde se concedió una autorización ante una petición.

¿Hubiese concedido la autorización para la instalación de una pista de verano en el hípico de haber sabido la polémica que se ha suscitado?

-- Es que la polémica surge porque fue una iniciativa que tuvo éxito, y los que quisieron incorporarse con posterioridad no pudieron hacerlo por una cuestión de espacio, no cabían más. Si hubiese habido espacio, no habría habido ninguna razón para no incorporar a más empresarios. Tampoco nos olvidemos que el ayuntamiento está obligado a cumplir la Ley de Ocio y Convivencia de la Junta, y que esa iniciativa se planteó en verano como una alternativa.