La Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), organismo que depende del Ministerio de Medio Ambiente, tramita la petición presentada por la sociedad Proyectos de Ingeniería Hidráulica para el uso hidroeléctrico de aguas superficiales del río Almonte en el tramo que sirve de límite entre los términos municipales de Monroy y Trujillo. Según indicaron fuentes del organismo de la cuenca, la tramitación de esta solicitud "no implica que vaya a hacerse", ya que "ahora sólo se está en una de las fases del proceso", que, entre otros requisitos, lleva "la evaluación ambiental" del proyecto, indicaron las fuentes citadas.

La fase que se está tramitando es la que corresponde a la presentación de proyectos en competencia por otras empresas que estén interesadas en el aprovechamiento hidroeléctrico solicitado. El caudal pedido por la sociedad, que tiene su sede en Madrid, es de 25.000 litros/segundo.

Esa zona del Almonte fue la elegida en una primera fase para la ubicación de la presa para el abastecimiento de agua a Cáceres, una idea cada vez más descartada, no sólo por la afirmación del alcalde, José María Saponi, de que la Confederación del Tajo apuesta por traer el agua de Portaje, sino también por lo anunciado en el último consejo de ministros, que se celebró en Mérida, por la titular de Medio Ambiente, Cristina Narbona.

Entre las obras en desarrollo o que se iniciarán próximamente, por parte del Ministerio de Medio Ambiente se anunció al término del consejo de ministros que se está evaluando el impacto ambiental de diversas opciones, y que la más conveniente parece ser el transporte de agua desde la presa de Portaje, que está a unos 65 kilómetros de Cáceres.

El principal inconveniente que se pone a la construcción de una presa en el Almonte es el impacto ambiental que se causaría en la cuenca del río.