El mes de noviembre es la fecha límite que baraja el promotor del mercadillo de Mejostilla para comenzar su actividad. Desde que se puso en marcha esta iniciativa se fijó el otoño para el inicio de la actividad, pero la previsión entonces era comenzar a trabajar en septiembre u octubre. Ahora se habla de noviembre y el promotor, Antonio Salazar, atribuye el retraso a la lentitud con la que han llevando a cabo los trámites para adecuar la parcela del parque empresarial en el que se desarrollará la actividad. Aún están recibiendo y evaluando los presupuestos de las empresas que optan a llevar a cabo esos trabajos.

"Esperamos poder comenzar en 15 días", baraja Salazar sobre la fecha probable de inicio de la actuación de mejora. En los mismos se incluyen la estabilización del firme de la parcela y la instalación de los 260 puestos que contempla llenar este proyecto. Se trata de estructuras de cuatro metros de longitud entoldadas. También se cubrirán los pasillos, para proteger a los compradores tanto del sol como de la posible lluvia.

SERA LOS SABADOS El mercado se celebrará finalmente los sábados, tras la oposición de Aeca a que se hiciera en la jornada dominical, como había previsto inicialmente el promotor. La postura de los comerciantes cacereños fue ratificada por el informe de la dirección general de Comercio. En el mismo se señalaba que esta iniciativa no es un centro comercial abierto ni un mercadillo de venta ambulante, sino un establecimiento comercial de más de 2.500 metros cuadrados (la parcela supera los 23.000), por lo que solo podrá abrir 8 domingos al año.

El promotor mantiene además la propuesta de que una parte de los 260 puestos sean ocupados por establecimientos de la ciudad. El porcentaje de puestos no está aún definido, pero podría salir de la reunión que Salazar ha solicitado a la Cámara de Comercio y que se celebrará en los próximos días. "Definiremos con ellos si los establecimientos de Cáceres quieren participar y fijaremos un cupo para ellos, como siempre hemos dicho que se haría", señala.

La mayor parte de los puestos se destinarán al textil y al calzado, aunque también habrá de hogar y de alimentación.