"Hoy vamos a hacer un pequeño viaje musical. La música siempre ha estado unida a nosotros y siempre hemos tratado de comunicarnos a través de los sonidos". Antonio Cabedo, director invitado de la Orquesta de Extremadura, se dirige al patio de butacas repleto de alumnos que, gracias a una clase magistral, salen del Gran Teatro convencidos de su amor por la música.

La sala abrió ayer sus puertas para 1.000 escolares de la provincia de Cáceres que acudieron a los dos conciertos didácticos que ofreció la orquesta extremeña. Isidro Timón, director del Gran Teatro, explicó que esta iniciativa forma parte de los nueve conciertos de abono que la agrupación musical ofrece cada año. Timón comentó que la orquesta "hace un programa para niños, que escuchan música muy variada como Falla, Strauss o hasta la Pantera Rosa".

A la cita de ayer asistieron, en la primera sesión, los colegios La Montaña, La Hispanidad, Sagrado Corazón, Extremadura, Moctezuma, Prácticas, San Francisco y Delicias. En la segunda estuvieron Cervantes, Luis de Morales, San Pedro de Alcántara, Vivero, Alkaceres, Agora, Vía de la Plata, Talayuela, Gabriel y Galán y Santa Lucía del Trampal.

Y antes de comenzar, los alumnos reciben una advertencia --"en un concierto de música clásica no se silba, sólo se aplaude"-- y una norma básica: "Antes de comenzar, todos los miembros de la orquesta afinan para que todos toquen como un solo instrumento y por eso un concierto resulta genial".