El edificio donde está la Inspección de Trabajo, los sindicatos UGT y CCOO y la federación empresarial se vende. Es una decisión que se adoptó en la última reunión de la Comisión Consultiva Nacional del Patrimonio Sindical, organismo dependiente del Ministerio de Trabajo y en el que participan los agentes sociales y la administración del Estado. El edificio tiene ocho plantas da a tres calles y, además de su significación histórica, se encuentra en el centro neurálgico, administrativo y comercial de la ciudad. Su fachada principal da a la avenida Primo de Rivera y está situado frente al Múltiple.

"Es un edificio que no nos sirve, tiene problemas de conservación y por eso se acordó desprendernos de él", aseguró, a preguntas de este diario, José Ignacio de Solís, subdirector general del Patrimonio Sindical del Ministerio de Trabajo. De Solís aclaró que el acuerdo que se tomó en el último pleno de la comisión consultiva fue enajenar el inmueble. "Está por decidir si por venta o permuta", añadió. El subdirector general del Patrimonio Sindical indicó que se está abierto a venderlo a promotores privados convocando una subasta o a llegar a un acuerdo con otra administración interesada en el edificio.

PROCESO LARGO De Solís quiso dejar claro que se está en el inicio de un proceso "que va a ser largo". La venta de este edificio se presenta, a causa de su ubicación, como una de las operaciones inmobiliarias más destacadas que se harán en la ciudad a medio plazo. Con independencia del uso urbanístico que actualmente se autorice en el solar, la decisión de enajenarlo coincide con el proceso de revisión del plan general de urbanismo.

Además de a la avenida Primo de Rivera, donde el plan de urbanismo en vigor permite edificaciones de hasta diez plantas, el edificio sindical da a las calles General Yagüe, por donde se accede a la sede de CCOO, y Obispo Segura Sáez, donde tiene su entrada UGT y la federación empresarial. De Solís comentó que no se ha adoptado ninguna decisión sobre a quién podría venderse, que sólo hay el acuerdo de enajenarlo y que en caso de que se optase por promotores privados o particulares sería mediante procedimiento abierto y público. Los servicios técnicos del Ministerio de Hacienda se encargarían de valorar el edificio.