Mis hijos no tenían ni un duro, ni una perra, si querían un paquete de tabaco, yo se lo compraba y si querían beber una cerveza yo se la daba». Esta fue la respuesta de A. M. P., uno de los 117 acusados por blanqueo de capitales, a la pregunta del ministerio fiscal sobre el nivel económico de su descendencia -también imputada-. A continuación hizo mención a una cuenta bancaria en el que uno de sus hijos acumulaba 70.000 euros. El imputado defendió su inocencia y la de su familia y sostuvo al igual que el resto de acusados que el dinero que acumulaban procedía de la venta ambulante, de la chatarra y en su caso de la venta de ganado. Su mujer, C. M. S. también declaró ayer ante el juez como imputada y ratificó el testimonio de su marido. Ambos son titulares de una cuenta en el banco popular con el abono de 15.000 € que procedía de un préstamo en el que eran avalistas los también acusados María Luz Vázquez Vargas e Isidoro Montaño Pardo ambos con antecedentes por tráfico de drogas. También defendió su inocencia J. V. V. que abrió hasta seis cuentas bancarias con movimientos en efectivo de importes considerables entre los años 2005 a 2014, a pesar de tener en todo ese periodo unos ingresos legítimos por importe de 17.619,14 €.

La sesión de ayer, la tercera desde el inicio de la apertura del juicio oral, se prolongó durante alrededor de una hora y media. Para los tres fiscalía pide una pena de seis años de prisión por blanqueo de capitales y dos años por pertenencia a organización criminal. La defensa por su parte insiste en que el dinero de sus clientes procede «de los ahorros de su trabajo durante años».

MÁS NUMEROSO DEL PAÍS // Cabe destacar que el juicio que acoge la audiencia provincial cacereña es el más numeroso del país en cuanto a cifra de acusados (117) y abogados defensores (38). Es por este motivo que la vista se celebra en una sala habilitada en la facultad de Turismo y Empresariales. La previsión es que la vista se prolongue durante seis meses.

Los hechos que les imputan ocurrieron entre 2005 y 2014 y los acusados proceden principalmente deSan Lázaro en Plasencia. También los hay que residen en Cáceres, Navalmoral de la Mata, Madrid y Málaga. Sobre ellos (64 mujeres y 59 hombres) pesa un presunto delito de blanqueo de 13 millones de euros. Según la fiscalía, muchos de los acusados abrieron cuentas corrientes a nombre de menores de su propia familia.