A principios de año se iniciará, con toda probabilidad, el derribo del edificio Cánovas, un inmueble emblemático de la avenida de España, construido en los años 50 y que no estaba protegido por el Plan General de Ordenación Urbana. La empresa madrileña Corporación Boznos se encargará de acometer la obra de 10 plantas, que incluirá la construcción de viviendas de alto standing .

Según informó el abogado Jesús María García de Piedra, letrado de la inmobiliaria cacereña Multigestión Extremeña, que se encargará de la comercialización y venta, el metro cuadrado podría superar los 3.000 euros (500.000 pesetas).

VEINTISEIS PISOS

El nuevo edificio contará con dos o tres plantas para garajes, locales comerciales y oficinas. A partir de ahí se elevarán los pisos. Habrá entre dos y tres por planta y sumarán un total de 26.

García de Piedra confirmó que los planes de la nueva propiedad pasan por iniciar la demolición en el mes de enero. Fuentes municipales comentaron a este diario que, desde el punto de vista administrativo, solamente resta la aprobación del proyecto de ejecución y que la licencia urbanística ya está aprobada.

Una vez que esta cuestión administrativa se haya resuelto las obras darán comienzo y los cacereños se encontrarán con un edificio moderno que tratará de adecuarse al entorno paisajístico de Cánovas.

La fachada, más moderna que la actual, será de ladrillo aplantillado. El edificio tendrá piedra y cantería y los materiales serán nobles, acordes siempre al precio de la vivienda.

El derribo del edificio Cánovas pasa por un largo pleito que se remonta a los años 80 y que ha llegado incluso al Tribunal Supremo, tal como ha venido publicando este periódico de forma reiterada. El inmueble era propiedad del cacereño Antonio Mendieta Cordero, que lo vendió a la sociedad Personuá. Posteriormente, ésta lo vendió a Don Casa y, de forma definitiva, ha llegado a manos de Corporación Boznos.

El edificio contaba con numerosos inquilinos --algunos pagaban rentas muy bajas de entre 6.000 y 8.000 pesetas--. En el lugar estuvo ubicado el Juzgado de Menores, la cafetería Metropol y, en la actualidad, Modas Carol (que ya ha adquirido otro local para trasladarse).

La desocupación de la casa ha pasado un largo trámite burocrático que parece haber llegado a su fin.