Una parte de la muralla de Cáceres cayó ayer por la mañana sobre un coche que estaba estacionado en el Adarve del Padre Rosalío, a pocos metros del Arco de Santa Ana. El derrumbamiento de piedras y tierra debió suceder entre las 9.00 y las 11.00 horas, según vecinos de la zona, y dejó inservible la luneta delantera del vehículo, un Opel Astra.
El propietario del vehículo, un vecino de la misma calle, manifestó a este diario que agentes de la Policía Local de Cáceres se personaron en el lugar de los hechos y le informaron de que el ayuntamiento correría con los gastos de la reparación. Según manifestaron el propietario del vehículo y otros vecinos, no es la primera vez que cae algún trozo de la muralla sobre vehículos estacionados.
ACTUACIONES El pasado mes de noviembre, el ayuntamiento anunció por boca del concejal de Innovación, Víctor Santiago Tabares, la conclusión de un estudio sobre el estado de la muralla que arrojaba la necesidad de actuar en ella después de detectar que no hay ninguna torre o tramo que no precise intervención.
Santiago manifestó ayer que se va a presentar al Ministerio de Cultura una propuesta de actuación en la muralla antes del mes de marzo. El ayuntamiento espera que la muralla se beneficie de una línea de financiación del ministerio para conjuntos amurallados. Paralelamente, se está elaborando el Plan Director de la Muralla, que establecerá las futuras actuaciones en ella.
