El Museo de Cáceres ha cerrado con éxito de público su primer horario nocturno de verano. Algo más de 4.500 visitantes han pasado por el centro de Las Veletas desde el 23 de junio hasta el pasado domingo entre las nueve hasta las doce de la noche.

La Consejería de Cultura puso en marcha esta experiencia piloto en el museo cacereño y en el MEIAC de Badajoz con la intención de estimular el flujo de visitantes durante los meses de verano. En el caso cacereño, la experiencia "ha sido muy positiva", según valoró a este diario el director del museo, Juan Valadés. El proyecto arrancó con polémica ante la protesta de los trabajadores del museo por la contratación de vigilantes privados para cubrir el nuevo horario, aunque finalmente todo ha transcurrido con normalidad.

Las cifras óptimas de visitantes hace previsible que la iniciativa se repita en años sucesivos, aunque es una cuestión que está aún por decidir. "Depende de la consejería, aunque por nuestra parte --señaló Valadés-- sí nos interesa que se mantenga este horario en verano porque es una forma de ampliar nuestra oferta, no sólo para los turistas sino para la gente de Cáceres".

UN 19% MAS DE CACEREÑOS De hecho, una gran parte del público nocturno que ha tenido el museo estos meses pasados eran cacereños. El director explicó que, aunque el museo se nutre principalmente de visitantes foráneos, se ha detectado con el nuevo horario el incremento de visitantes de la propia ciudad. Mientras que lo habitual es que de todo el público que acude al museo, el 14 o 15 % proceda de Cáceres, este verano ese porcentaje se ha situado en un 19%.

Por el museo han pasado este verano 29.190 personas, 9.846 durante el mes de julio y 19.344, en agosto. Estas cifras suponen un incremento notable sobre el número de visitantes del verano del 2005. Así, en julio las cifras de visitas subió un 16% y en agosto, un 8%. El aumento es sobre todo destacable porque en los meses anteriores de este año, el volumen de visitas había descendido, "no espectacularmente", o se había mantenido estable respecto al año anterior, pero sin crecer. Por lo tanto, "sí podemos atribuir al horario nocturno el incremento de visitantes", concluye el director.

El horario nocturno no ha sido de todos modos la única motivación para recorrer este verano las diferentes salas del Museo de Cáceres. La programación estival del centro ha contemplado estos meses cuatro conciertos, también por la noche, dentro del ciclo Música en el jardín .