La nueva Asociación de Usuarios de la Ciudad Antigua (AUCA) acaba de nacer en Cáceres con el fin de colaborar con las instituciones locales en la búsqueda y propuesta de soluciones que dinamicen el casco histórico. De hecho, según aseguró ayer su presidente, Ignacio Ferrer, ya se está trabajando en un informe que se entregará al ayuntamiento antes de la próxima inspección que va a realizar la UNESCO para revisar el título de Ciudad Patrimonio de la Humanidad.

En este sentido, el arquitecto y vocal de este colectivo, Angel González, reconoció que todavía faltan "muchas cosas por hacer" y criticó el estado de conservación de la muralla, uno de los pilares en los que se basó la UNESCO para conceder el reconocimiento. Por ello, González recordó que otras ciudades "menos importantes" sí han recibido fondos para rehabilitar y conservar sus murallas. "Si fuera inspector de la UNESCO les daría un tirón de orejas a las administraciones locales", señaló.

PROBLEMAS Asimismo, González afirmó que en el casco antiguo existen "problemas endémicos" como la recogida de basura, las pintadas, la limpieza, el pavimento, el cableado o los aparcamientos. Una posible solución propuesta por AUCA es que se "flexibilicen las normas urbanísticas" de rehabilitación en los edificios y locales, porque consideran que el Plan Especial de Protección y Revitalización del Patrimonio Arquitectónico de Cáceres es "demasiado estricto", aunque lo más importante sea que "se adapten al entorno".

Otro de los aspectos en los que quieren hacer hincapié es en el referente a la accesibilidad. Así, la asociación pedirá que se cumpla la normativa, pero que "se aplique de manera lógica".

Ferrer dejó claro que no buscan resolver problemas individuales, sin embargo están abiertos a la participación ciudadana y a que se pongan en contacto con sus promotores a través de auca-cacereshotmail.es.

Por su parte, la junta directiva también la componen Cándido Abreu como secretario; Cecilia Calderón, tesorera; y como vocales, Nieves Fernández, Montaña Luengo y Luis Hernández Alvarado. Muchos de ellos conocen bien el casco antiguo cacereño porque viven o trabajan en él.