«No debemos caer en el pánico porque al final nos vamos a coartar nuestra libertad y va a ser un sinvivir», afirma la presidenta de la Asociación Derechos Humanos, Flor Fondón. Según ella los ayuntamientos deberían poner en funcionamiento los denominados ‘planes de urbanismo con perspectiva de género’. Entre otras cosas, estos programas contemplan presencia constante de la Guardia Civil y de la Policía Local en todas las localidades (también en los pueblos pequeños, donde a veces no operan estos cuerpos), instalar paradas de autobuses más cercanas, iluminar las calles y concentrar los servicios públicos. «El objetivo de estos planes no es otro que dotar a las ciudades de una mayor seguridad para las mujeres», añade Flor Fondón.