Gargantas, montañas, miradores, senderos y una extraordinaria arquitectura popular. La Vera lo tiene todo para disfrutar de día. Y ahora también será posible disfrutar de sus paisajes celestes por la noche. Raúl Tomás Pérez acaba de crear la empresa VerAstronomía, dedicada a un sector en pleno auge, el turismo de estrellas. Lo ha hecho apoyado por el programa ‘Cáceres Impulsa’. Residente en Madrid, siempre quiso regresar a sus raíces, a la Extremadura de sus abuelos, y ha adquirido un inmueble en Villanueva de la Vera convertido ya en el eje de su nuevo negocio: hacer que la gente disfrute contemplando planetas, estrellas y constelaciones.

«Los cielos de La Vera son espectaculares», subraya. En efecto. Cáceres ofrece una de las bóvedas celestes de más calidad y menor contaminación de Europa (tanto atmosférica como lumínica), ligada a paisajes privilegiados. «Por eso decidí crear una empresa de astroturismo que ofrezca observaciones, paseos por el cielo, charlas de divulgación… Iremos trasladando el telescopio por las distintas poblaciones. Tengo previstas otras actividades como cursos de astronomía, todo irá dependiendo de la demanda», explica Raúl Tomás Pérez, miembro de distintas asociaciones astronómicas y presidente de una de ellas en Madrid.

«Me fascina, por eso di el paso a montar el negocio. Pero lo que más me incentivó fue mi participación el pasado año en los premios PIE (Programa de Ideas Emprendedoras en el Mundo Rural, de la Diputación de Cáceres), donde logré quedar finalista», señala. No se trata de un mero galardón: los participantes deben pasar varias selecciones, un periodo de asesoramiento y formación, y una exposición y defensa de sus propuestas.

«Con todo ello me vine arriba y decidí montar la empresa. Ya está constituida y dada de alta como negocio turístico en Extremadura. Solo falta esperar a que regresen los turistas. De todos modos, el astroturismo tiene su principal actividad en meses más cálidos y las primeras actividades se han programado para abril», indica el emprendedor.

Su experiencia con el programa ‘Impulsa’ y en general con las administraciones cacereñas ha sido «muy muy positiva, y así se lo digo a todos. Si tuviera que montar la empresa en otro lugar no hubiera sido tan fácil. He recibido una ayuda inestimable en la Diputación, en el Punto de Apoyo al Emprendedor de Plasencia, en el programa de mentoring y en la Cámara de Comercio, donde me han facilitado una parte tan complicada como los contactos», agradece.