Yamen Wang tiene 11 años y desde hace casi cuatro se encuentra viviendo con su familia en Cáceres. Aquí asiste al colegio en donde aprende español y en verano refuerza lo aprendido en las clases gratuitas que ofrecen los responsables del servicio del Teléfono de la Esperanza.

Es la alumna más aventajada del aula y además ayuda a sus padres, que también asisten a veces a clase, para hacerles de intérpretes.

Yamen asegura que no le resulta difícil aprender español y que "hay que echarle tiempo y tener paciencia".

Sus profesores confirman su buena actitud en las clases. Recuerda, en este sentido, que a los niños les cuesta siempre menos aprender el idioma que a las personas mayores.

También ayuda a los profesores en las clases, mediando entre las personas asiáticas que no conocen nada de español.

El verano pasado Yameng estuvo de vacaciones en su país y dice que algún día tanto a ella como a sus padres les gustaría volver a China, donde está el resto de su familia.

Pero como de momento se encuentra en España quiere aprender lo máximo posible y "encontrarme a gusto con la ciudad y hacer amigos".