La aparición de algunos casos de escarlatina en la ciudad, detectados hace escasos días, había creado una cierta alarma a la que desde el Servicio de Epidemiología se resta importancia. Se reconoce que esta enfermedad no es ya frecuente, y se mantiene que no es preocupante, pues hoy en día la escarlatina no es ya una enfermedad que suponga problema grave. "Al tratarse de una infección provocada por un germen se puede tratar con antibióticos y, además, no es muy contagiosa. Ahora existe un tratamiento eficaz para ella, con lo cual ya no presenta la gravedad que presentaba hace 80 años".