El director del proyecto de la ronda norte, Vicente Dochao, explicó que se ha diseñado con las características de una vía urbana, como una avenida. El límite de velocidad será de 60 kilómetros/hora, y a esto ayudará tanto la ubicación de rotondas, hay ocho en todo el recorrido, como el diseño en alzado y planta de la ronda, que en dos de sus tramos tendrá una pendiente máxima de un 7%. La idea inicial es que en todo el trayecto los dos carriles estén al mismo nivel, aunque es posible que en el tramo que circunda la Sierrilla estén en dos alturas.

En dos puntos de la ronda se colocarán pasarelas para el paso de peatones, y la conexión entre el parque del Príncipe y el olivar de los Frailes, las dos zonas verdes más grandes de la ciudad, será por un paso por debajo de la ronda a la altura de fuente Hinche.

EL MOVIMIENTO DE TIERRAS

Dochao comentó que se hará un seguimiento arqueológico y que en dos de las rotondas se reubicarán bienes inmuebles con valor patrimonial afectados por la obra, que se ejecutará en dos tramos que se harán al mismo tiempo y que se prevé que estén terminados a mediados del 2004. La ronda podría estar abierta a finales de ese año. Sólo en desmontes se moverán casi 350.000 metros cúbicos de tierra.